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Anchoa (Engraulis encrasicolus), ilustración de Les poissons. Henri Gervais, 1877 CC PD.
Parábola de la angula y la anchoa

Parábola de la angula y la anchoa

Historias de tripasais ·

En 1941, el escritor bilbaíno Luis Antonio de Vega explicó con un relato la ley de la oferta y la demanda gastronómicas

Ana Vega Pérez de Arlucea

Lunes, 12 de noviembre 2018

Con algo de suerte y buena memoria recordarán que hace unos meses hablamos aquí de mi ojito derecho en esto de la crónica gastroliteraria, don Luis Antonio de Vega (1900-1977), y hoy vuelvo a contarles más cosas de él. Qué le voy a hacer ... si me suliveyan los perjúmenes de ese señor txirene y zampón, oigan. Qué le voy a hacer, si lo contó casi todo y casi todo bien, con una gracia que para sí quisieran los Brillat Savarines y Josep Plas de turno. Mientras las tendencias se empeñan en que no haya ni un restaurante sin su tataki de atún o su tartar de salmón, sin su merlucita plancha ni su pulpo a la brasa, hace 77 años al amigo Luis Antonio ya hablaba de que el valor que damos a los pescados (y a los alimentos en general) es completamente arbitraria. Puro postureo.

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