Declarados por la Unesco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, los 'hawkers' de Singapur son el principal atractivo gastronómico de esa ciudad-estado que es uno de los principales centros financieros del mundo. Auténticos mercados de cocina callejera que agrupan una infinidad de puestos con la ... oferta más variada. A cualquier hora del día singapurenses y visitantes piden sus platos en su puesto preferido, cada uno con su especialidad, y luego la comen en alguna de las mesas compartidas que se reparten por todos los pasillos. Allí destacan las tres principales cocinas que se dan cita en Singapur, un maravilloso ejemplo de fusión culinaria: la china (y muy especialmente la cantonesa), la malaya y la india, pero el abanico es mucho más amplio, incluyendo indonesios, tailandeses, japoneses o incluso filipinos. En una ciudad de precios disparatados, estos espacios, que reúnen autenticidad y sabor, permiten sobrevivir perfectamente sin que sufra el bolsillo. De hecho el precio de estos platos suele estar entre los cuatro y los ocho euros, y las raciones son abundantes. Para beber, zumos y agua. Apenas se encuentra cerveza.

Publicidad

Estos 'hawkers', y su versión más moderna, los 'food court', se convierten en espacios especialmente seductores para el gastrónomo, que disfruta mucho eligiendo las especialidades de cada uno de los puestos. Desde dimsum (y especialmente los magníficos 'xiao long bao' que se hacen al momento) hasta las populares y deliciosas laksas pasando por potentes curries y platos de marisco que tanto gustan allí. Sopas de wanton, noodles con gambas, carne de pato, el tradicional 'nasi lemak' (a base de arroz, pollo, huevo, cacahuetes, crema de chiles y pescadito frito) o unas brochetas satai. De todo y para todos.

Muchos de esos puestos aparecen en la Guía Michelin, casi siempre como bib gourmand aunque algunos incluso lucen una estrella. Los más bulliciosos son los de Chinatown, como Hom Lim, poco recomendable para melindrosos, o el Complex Food Center. Más turístico, recomendable para exquisitos, Lau Pa Sat, el más antiguo de la ciudad, en un precioso edificio de hierro forjado. Y así hasta 114 en toda la ciudad. No se entiende Singapur sin los 'hawkers'.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad