Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Aperitivo de la casa y pan artesano, X euros por persona». Una frase habitual en las cartas de los restaurantes. Aperitivo que muchas veces no pasa de unas míseras aceitunas. Se trata de un viejo debate, ¿se debe cobrar el pan aparte cuando la factura ... final se va a ir alegremente por encima de los 80 euros? No digamos nada cuando en un menú degustación que supera de largo los cien euros encontramos que el pan se añade como un coste extra en la factura. Surge entonces la duda ¿Y si sólo quiero pan pero no aperitivos? ¿Los puedo devolver para que no me los cobren?
La verdad es que la costumbre de cobrar el pan se extendido en los últimos años. En algunos sitios al menos se hace constar en la carta, pero no siempre es así. En la cuenta impresa de un restaurante que visité recientemente encontré reflejado un cargo de 18 euros en concepto de «pan, servicio y aperitivo». Cuatro comensales, cuatro euros y medio por persona, más que la caña de cerveza y lo mismo que una copa de vino.
Una barra entera de pan viene a costar poco más de un euro, así que los márgenes, salvo que el aperitivo sea abundante y de calidad, resultan ciertamente abusivos. Si al menos el pan fuera bueno, pero no suele ser el caso. Se echan en falta cocineros capaces de trabajarlo en su propio restaurante. Ejemplos como Samuel Moreno en El Molino de Alcuneza o Jesús Monedero en Palio (Ocaña), capaces de elaborar panes de la máxima calidad, no abundan. Pero esto de la calidad del pan es una historia que dejamos para otro día.
Debería ser obligatorio preguntar al cliente si va a querer ese pan, pero son minoría los sitios donde lo hacen. Lo habitual es que pan y aperitivo lleguen a la mesa sí o sí. Y a pagarlos luego. Algunos restaurantes de postín de Madrid, no hace muchos años (a lo mejor lo siguen haciendo, pero no he vuelto por allí), colocaban en las mesas platos de jamón. Cuando el cliente se sentaba, si no estaba avisado y pedía que lo retiraran, empezaba a comerlo y la ración disparaba la factura. En muchos sitios de Portugal ocurre lo mismo, aperitivos en la mesa, aunque con productos más modestos, que los comensales pueden rechazar sin problemas. Pero siempre hay alguien que pica. Y que paga.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.