Pussy Riot aparece en un concierto en Berlín tras escapar de Rusia

La artista estaba arrestada en su domicilio por sus críticas a la guerra de Ucrania y, sin embargo, se las ingenió para escapar ¡disfrazada de repartidora! Aliójina, de 33 años, ya estaba 'fichada' por los agentes por ignorar las restricciones impuestas ante la pandemia de coronavirus al organizar una protesta a favor de la liberación del opositor Alexei Navalni.

Según revela el diario 'The New York Times', la joven se disfrazó de repartidora para eludir a la Policía que vigilaba la vivienda de una amiga donde se alojaba. Dejó allí su teléfono para evitar ser rastreada y un amigo la llevó a la frontera con Bielorrusia. Tardó una semana en llegar a Lituania. Seguía los pasos de su novia, Lucy Shtein, que también logró huir mediante una artimaña similar: vestida con chubasquero y pantalones verdes.

Este jueves por la noche tenían previsto dar un concierto en la capital alemana y no faltaron a la cita. Durante el mismo, Aliójina descubrió su rostro poco después de saltar al escenario y los asistentes rompieron en gritos y aplausos. Un delirio.

El grupo se ha convertido en la imagen de la resistencia antiPutin desde 2012. El 17 de agosto de aquel año, irrumpieron en la catedral de Cristo Salvador de Moscú ataviadas con pasamontañas de colores para pedirle a la Madre de Dios que librara al mundo del dirigente. Tras esa actuación, Aliójina fue sentenciada a dos años de prisión por vandalismo, su pena más larga, y puesta en libertad en diciembre de 2013. Aquello supuso un punto y aparte en la vida de 'Masha' y en la trayectoria de la formación.