Canadá quiere estrechar lazos con Europa

«Ahora es más importante que nunca que Canadá refuerce sus vínculos con aliados fiables como Francia», ha declarado Carney durante una rueda de prensa conjunta, celebrada antes de reunirse en la sede de la presidencia gala. Tras haber sido investido el pasado viernes al frente del Ejecutivo canadiense, este exbanquero ha iniciado en la capital francesa una gira por Europa que continuará en el Reino Unido. Ante la agresividad de la Administración Trump, que ya ha aplicado aranceles del 50% sobre el acero y el aluminio de su país, Ottawa busca diversificar sus apoyos. Y mostrar que los vínculos transatlánticos persisten, a pesar de la unilateralidad de la Casa Blanca.

Carney ha hecho énfasis en expresar sus diferencias respecto a la posición de Washington sobre la guerra de Ucrania, además de mostrar su voluntad de mantener una estrecha relación con el Viejo Continente. «Canadá siempre responderá 'presente' para garantizar la seguridad de Europa», ha dicho. «Los dos (Macron y Carney) estamos a favor de la soberanía y la seguridad, como lo demuestra nuestro apoyo constante a Ucrania», ha añadido el dirigente liberal y actual presidente del G7. Con estas palabras, ha mostrado de manera implícita sus discrepancias respecto al acercamiento de Trump a Moscú y su presión sobre Kiev para acabar con la guerra que comenzó en febrero de 2022.

Macron también ha aprovechado esa comparecencia para criticar la política comercial de corte proteccionista de la nueva Administración estadounidense. «Debemos defender un modelo que no consista ni en la ley del más fuerte ni el aislacionismo», ha asegurado el presidente. Su país hace frente desde la semana pasada a la amenaza de Trump de aplicar unos aranceles del 200% sobre el vino, el champán y otras bebidas alcohólicas procedentes de Francia y el resto de los Estados miembros de la Unión Europea.

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Además, el dirigente galo ha lanzado una pulla al vicepresidente norteamericano, JD Vance, quien criticó una supuesta falta de libertades en Europa con un discurso muy controvertido durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, celebrada a mediados de febrero. «Consideramos que la libertad de expresión significa otra cosa que el odio, la violencia, el acoso en línea y los algoritmos opacos», ha afirmado, haciendo una mención implícita a la red social X, propiedad de Elon Musk, miembro informal (y muy destacado) de la Administración Trump.

Macron quiere mantener con Carney una relación igual de fluida que con su predecesor, Justin Trudeau. Tras nueve años al frente del Gobierno canadiense anunció su dimisión en enero debido a su impopularidad y las malas perspectivas electorales de su formación. Ante las veleidades anexionistas de Trump, estas últimas semanas ha crecido en Canadá un espíritu patriótico y crítico con Estados Unidos, lo que se ha visto reflejado en una remontada en los sondeos por parte del Partido Liberal.

Este mismo sentimiento estuvo presente en el Elíseo, aunque tanto Macron como Carney se mostraron precavidos con sus críticas. El primer ministro canadiense aseguró que «debemos mantener las relaciones lo más buenas que se pueda con Estados Unidos». Ni a Francia ni a Canadá les interesa enrabietar al imprevisible presidente norteamericano.