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El ministerio de Exteriores ha advertido este miércoles a los alemanes de los viajes a Estados Unidos ante la posibilidad de ser detenidos y deportados ... al entrar en ese país, aunque se trate de simples turistas, tras varios casos de ciudadanos germanos que han sufrido recientemente esas medidas. «Las condenas previas en EE UU, la información falsa sobre el motivo de la estancia o incluso un ligero rebasamiento de la permanencia al viajar pueden dar lugar a arresto, detención y deportación a la entrada o a la salida» de las fronteras norteamericanas, advierte la página web del departamento.
Esta es la respuesta de la ministra de Exteriores, la verde Annalena Baerbock, a las detenciones y deportaciones aisladas de alemanes en Estados Unidos. Un portavoz del ministerio subrayó que «los incidentes de la semana pasada en los que se vieron implicados ciudadanos alemanes que viajaban a Estados Unidos» se están tomando muy en serio. El cambio de recomendación no tiene nada que ver con una advertencia de viaje, como la emitida por el ministerio para algunos países considerados peligrosos como Afganistán o Somalia.
El portavoz ha destacado que este martes se tomó la decisión de adaptar la información sobre viajes y seguridad para EE UU, en particular en lo relativo a los controles de entrada. «Hemos aclarado y ahora subrayamos claramente que una autorización ESTA, el sistema electrónico de autorización de viaje, o un visado estadounidense no siempre dan derecho a entrar en Estados Unidos», señaló el representante ministerial, quien subrayó que «la decisión final sobre si una persona puede entrar en EE UU corresponde a las autoridades fronterizas estadounidenses. Pero tampoco es ninguna sorpresa, en Alemania ocurre lo mismo».
Recientemente han salido a la luz varios casos de alemanes detenidos al entrar en Estados Unidos. Las medidas más estrictas en las fronteras estadounidenses bajo el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pretenden frenar la inmigración ilegal en el país. El portavoz del ministerio germano de Exteriores señaló, sin embargo, que el gobierno alemán aún no se ha formado una «imagen muy clara» de los motivos de la actuación de las autoridades estadounidenses.
Recordó además que tres ciudadanos alemanes han sido detenidos recientemente por las autoridades aduaneras estadounidenses, según medios germanos de manera arbitraria. Los tres fueron puestos bajo custodia a la espera de ser deportados al entrar en Estados Unidos. Entre ellos figura el caso de un alemán residente legalmente en EE.UU. que, según sus familiares, fue detenido en Boston y retenido en un centro de detención durante más de una semana. Todos recibieron el trato de criminales peligrosos al ser esposados con las muñecas y los tobillos a una cadena en la cintura. Dos de ellos fueron deportados directamente a Alemania.
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