Le Pen consigue el apoyo de la ultraderecha para «poner orden en Francia»

La líder de extrema derecha abandonará la presidencia del partido en septiembre para concentrarse en la campaña electoral. El joven ultraderechista Jordan Bardella, de 25 años, fue nombrado primer vicepresidente del partido y será el que asuma las riendas durante el tiempo que dure la campaña. El congreso se celebró en plena resaca electoral tras los malos resultados en las regionales francesas, celebradas el 20 y 27 de junio. Reagrupación Nacional, que aspiraba a presidir varias regiones, no ganó en ninguna. Le Pen confiaba en que una victoria en Provenza-Alpes-Costa Azul, la única realmente a su alcance, le sirviera de catapulta para llegar al Palacio del Elíseo.

Ayer dejó claro que no cambiará la estrategia de «desdiabolización» de la imagen e ideología del partido para atraer más votantes. «No daremos marcha atrás. Con todo el respeto que tenemos por nuestra propia historia, no volveremos al Frente Nacional», dijo la candidata. El Frente Nacional es el nombre del partido que fundó su padre, el líder ultranacionalista Jean-Marie Le Pen. Días antes del congreso de Perpiñán, su padre criticó la estrategia de su hija. O el partido recupera «su virilidad» y «vuelve a lo fundamental» o corre el peligro de «desaparecer», advirtió el fundador del Frente Nacional, que fue excluido del partido en 2015.

Su hija se mostró convencida de que una victoria suya es posible en 2022. «La vamos a buscar. No hay un plan de carrera ni un cálculo personal por parte mía. Una voluntad de servir mejor a Francia», añadió Le Pen. La presidenta de Reagrupación Nacional lamentó la fuerte abstención de las pasadas elecciones regionales (65,31%) e hizo un llamamiento a los simpatizantes del partido y a aquellos franceses desencantados con la política a movilizarse e ir a votar en las presidenciales de 2022.

«El 'chaleco amarillo' que se abstiene solo hace un ganador: Macron. El jubilado que se abstiene se condena a que nada cambie y a ir hacia la miseria. La víctima que se abstiene afianza al verdugo en su impunidad», dijo Le Pen, quien explicó que quiere ser «la candidata y después la presidenta de soluciones concretas y positivas para la vida cotidiana».