Secciones

Bizkaia
Margen izquierda

Margen derecha

Duranguesado

Costa

Nervión Ibaizabal

Álava

Gipuzkoa

Miranda
Política
Opinión
Mundo
Economía
Athletic
Clasificación

Athletic femenino

Bilbao Athletic
Bilbao Basket
Clasificación
Deportes
Fútbol

Baloncesto

Ciclismo

Golf

Pelot

Tenis

Formula 1

Motociclismo

Más deportes
Sociedad
Educación

Startinnova

Sucesos

Motor
Egiaz
Salud
IMQ

Encuentros con la Salud

Quirónsalud

Investigación
Ciencia
Vivir
Cultura
Libros

Arte

Teatro

Música

Ópera

Cine

Televisión

Aula de Cultura
Territorios
Libros
Pantallas
Bizkaia Dmoda
Gente
Televisión
Jantour
Restaurantes en Bizkaia
Tiempo de historias
Podcast
Antropía
Zurekin
Planes
Agenda

Esquí

Playas

Jaiak
Mendian
Rutas de senderismo
La Mirilla
Tecnología
XLSemanal

Servicios

Destacamos

Edición

48 fotos

Caravana dignidad

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Martes, 30 de octubre 2018, 23:05

Modo oscuro

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos. — Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.
Ueslei Marcelino - REUTERS / Pedro Pardo y Guillermo Arias - AFP

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Hace unos días una segunda caravana de migrantes centroamericanos puso rumbo a los Estados Unidos. Con la frontera entre Honduras y Guatemala cerrada, han optado por seguir su camino derribando las barreras. La marcha original, con más de 7.000 personas, continúa su avance hacia el norte de México, donde el presidente Peña Nieto ha enviado a cientos de policías. A pesar de las amenazas de Donald Trump, muchos miles prosiguen su viaje con la intención de alcanzar los Estados Unidos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Te puede interesar

El pediatra Carlos González alerta: «Estudiar se convierte en algo pesado cuando los presionamos»

El Diario Vasco
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia

El Norte de Castilla
Dos policías locales de Oviedo, condenados por abofetear a un vecino

El Comercio
Tobi, el perro que se escapó de casa para ir a la residencia de ancianos donde está ingresado su dueño

El Diario Montañés
El pueblo de Andalucía que pone sus casas en alquiler por solo 30 euros

Ideal

Publicidad

Publicidad

Noticias recomendadas

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia