Los concejos barajan solicitar la figura de parque natural para Obarenes y Cantabria

No es la primera vez, en todo caso, que se plantea esta propuesta, que llegó a tramitarse, incluso, aunque terminó en nada al cumplirse los plazos establecidos sin que se alcanzase un acuerdo unánime al respecto entre los municipios afectados. Fue hace varios años y se trató como ahora de un intento por proteger ese mismo ámbito natural cuando se supo de la redacción de un anteproyecto que planteaba dos trazados alternativos para la instalación de vías de alta velocidad, dentro del plan de mejora de la conexión ferroviaria entre Logroño y Miranda de Ebro.

Una de esas opciones irrumpía en la zona de los Obarenes y afectaba a un paisaje constituido fundamentalmente por plantaciones de viñedo, muchas de ellas históricas. De ahí que varios vecinos de la comarca jarrera, entre ellos el propio Gabriel Muga, crearan como respuesta la Plataforma por el Desarrollo Sostenible de La Rioja.

El intento por salvaguardar el espacio natural de los Montes Obarenes quedó entonces paralizado, al quedar descartado el paso de la alta velocidad por su entorno, pero la inquietud de los concejos vuelve a reactivarse ahora tras conocerse, según desveló en su día el colectivo ecologista Amigos de la Tierra, que se había tramitado ante la Administración central un proyecto para la puesta en marcha de una mina a cielo abierto en el espacio natural protegido Obarenes-Sierra Cantabria.

Se trata de una explotación que estaría destinada a la extracción de sílice para la producción de vidrio y que se situaría, en concreto, en los términos riojanos de Foncea y Cellorigo, y los burgaleses de Bujedo y Ameyugo.

Las manifestaciones de rechazo contra su apertura se han venido sucediendo desde entonces. Primero de la mano de Amigos de la Tierra, que fue quien advirtió de lo que consideraba una «amenaza» contra el ecosistema de una zona ya sujeta a protección, también el sindicato UAGR que cuestionaba el impacto que podría tener sobre las explotaciones agrarias y ganaderas que sustentan a vecindarios amenazados por la despoblación y, en última instancia, el propio Gobierno regional, que remitió al ministerio un informe desfavorable sobre la explotación 'María Ángeles', que abarcaría 47 cuadrículas mineras.

Pese al principio de acuerdo alcanzado por todos los municipios de ese entorno, de enorme valor paisajístico y medioambiental por la importancia de su flora y fauna, el regidor de Villalba echa en falta «una mayor implicación» por parte del Ayuntamiento de Haro, dado el peso específico que tiene dentro de la Comunidad. Muga considera que, pese a haber dado su visto bueno y apoyar la propuesta, el Consistorio jarrero parece haberse desmarcado del proyecto, mientras el resto de los concejos continúan en negociaciones para dar un paso que se considera imprescindible y decisivo a la hora de lograr la protección de la zona ante cualquier amenaza o agresión, actual o futura.

Para reforzar su discurso, recupera la figura de Félix Rodríguez de la Fuente, quien en numerosas ocasiones reivindicó la belleza de este espectacular espacio de La Rioja, y expresa un deseo que asegura compartir con el resto de los vecinos de la cornisa. «Quiero que mi hijo pueda disfrutar de lo mismo que yo disfruté en mi infancia», sostiene el mandatario municipal.

Muga ya se reunió con la presidenta de la Comunidad, Concha Andreu, que habría reconocido, según apunta, «el gran valor» de los Montes Obarenes en una de sus visitas, consideración que se ha visto refrendada por la Consejería de Sostenibilidad, al cuestionar formalmente el proyecto de Foncea y Cellorigo.

A falta de conocer si existe un interés especial en los términos donde se proyecta la explotación, que afectaría igualmente a la provincia de Burgos, el alcalde de Villalba espera a la apertura del periodo de alegaciones para presentar junto al resto de ayuntamientos vecinos un plan de ordenación que otorgue a la zona el estatus de Parque Natural y lo proteja, no sólo de esta iniciativa minera, sino de «otras agresiones que podrían plantearse en un futuro», una posibilidad que nadie descarta.