Jueves, 1 de agosto 2024, 00:04
El pleno del Ayuntamiento ha aprobado una propuesta destinada a que el edificio de Urkizu Pasealekua nº 1 y Bittor Sarasketa kalea nº 7, más conocido como Besitegui, tengan la calificación de permanecer en «estado de necesidad de rehabilitación». Este edificio que desciende desde Bittor Sarasketa y después gira hacia Urkizu fue ocupado por el Batzoki, sociedades gastronómicas o la academia comercial, entre otros. En base a una solicitud de Pilar Gonzalo se plantea una propuesta tendente a la rehabilitación de este inmueble que cuenta con 7.000 metros cuadrados . En principio, un grupo de propietarios ha alcanzado un acuerdo para rehabilitar el edificio.
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En una zona se propone construir viviendas, abierta al exterior, y en otro punto para equipamiento de oficinas. En este último no existe la posibilidad de hacer unidades residenciales. El Ayuntamiento posee un 3 % de la propiedad. Se trata de una edificación industrial y se recalificó como residencial.
En el caso de Beistegui hubo posibilidad de construir viviendas y todavía cuelga un cartel que anuncia su construcción y precios. No obstante, la negativa de un particular impidió su desarrollo final y permanece vacío hasta encontrar un proyecto que pueda ponerlo en marcha.
El edificio, obra del arquitecto Ramón Martiarena Lascurain, construido en 1951 «es un claro ejemplo de la arquitectura del movimiento moderno».
Desde el grupo político Elkarrekin Podemos, por medio de Isabel Fernández, se solicitó la construcción de viviendas sociales. En esta dirección, desde el PNV se habló en el pleno de la historia de esta empresa, su origen y el traslado a Vitoria. «Hemos conocido muchos usos en este edificio que van desde local de ensayos, sede de partidos, supermercado, concesionaria. Posee amplitud de usos y muy diferentes con lo que se requeriría ampliar el grado de apoyo entre los propietarios, una vez que existen muchos fines sociales, en el interior del edificio», dijoJosu Mendicute. Desde EH Bildu, Nerea Barruetabeña propuso, también, «alcanzar el máximo consenso entre las entidades y partidos para establecer los usos necesarios, en el área de propiedad municipal. Hay muchos locales utilizados por entidades y sería necesario conocer las necesidades». Ana Telleria, del PSE, habló de que «se requieren muchos trámites para avanzar en este proyecto, que requiere una junta de concertación en la que estén presentes todos los propietarios, con el fin de realizar la reparcelación para la equidistribución de los beneficios y cargas de la actuación. Va ser un proceso largo, entre notificaciones, alegaciones trámites y demás. Un 51,3 % de la propiedad apoya iniciar este expediente en favor de la rehabilitación».
La empresa Beistegui Hermanos fue fundada por los hermanos Domingo, Juan y Cosme Beistegui. En un inicio, fabricaban armas cortas, pero tras la Primera Guerra Mundial se dedicaron a la fabricación de bicicletas. En 1926 construyeron el primer taller en la esquina de Urkizu y Bittor Sarasketa (aún hoy conocido como 'edificio Beistegui'), taller que fue ampliándose hasta llegar a los 7.500 m2.
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El segundo taller de la empresa Hermanos Beistegui, después adquirido por Azpiri, en el que se colocó aquella placa, se construyó en 1951 y, cuando la empresa se trasladó a Vitoria en 1959. En 2002 y 2003 se hicieron viviendas.
Martiarena dejó una gran huella en Eibar. Entre algunos de los talleres, edificios y viviendas diseñados y construidos por este arquitecto están: la Fundición de Alfa (1950) -junto a Raimundo Alberdi-; el taller de la empresa Cadenas Iris en Barrena (1955); Pampo en Arane, 15 (1957/1958); la urbanización de Carlos Larrañaga (1949); la gasolinera de Azitain en Barrena, 19 (1951); la clínica privada de los doctores Izaguirre y Lecuona en la calle Pagaegi (1955); la Sindical en la plaza de Unzaga (1957).
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Su arquitecto Ramón Martiarena Lascurain nació en Zumaia el 28 de octubre de 1898. Entre 1927 y 1942 fue arquitecto municipal de Soria. Posteriormente, junto con Luis Alustiza fue asesor de la Obra Sindical del Hogar (OSH).
Ambos diseñaron y construyeron numerosas viviendas de protección oficial en Eibar. También colaboró con la Oficina Guipuzcoana de Regiones Devastadas y a partir de 1946 también realizó encargos privados.
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El pasado año, con motivo del Día Mundial de la Arquitectura, el Colegio Oficial de Arquitectos Vasco Navarros (COAVN) de Gipuzkoa y la Fundación Docomomo Ibérico colocaron una placa en el edificio Beistegui Hermanos (BH) de Eibar, en otro edficio correspondiente a Leonardo Azpiri, ocupado por viviendas.
Un primer proyecto para el desarrollo de viviendas, en el edificio de Beistegui, no se pudo llevar a cabo por la ausencia de acuerdos de los propietarios. Por ello, ahora se cuenta con una oportunidad única para poder desarrollar un plan estratégico y, así, dar salida a un edificio con cerca de 7.000 metros cuadrados. Los promotores de la propuesta exigen un cuidadoso tratamiento, ya que, anteriormente, se intentó la construcción de viviendas residenciales, pero la falta de acuerdo entre los propietarios acabó con la propuesta. Ahora, se pretenden, también nuevos usos para el inmueble.
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