El campeón mundial de triatlón que está detrás de la polémica de la ikurriña

«Es la primera vez que soy campeón del mundo», expresa Mujika. Su profesión, la de bombero, le permitió participar en varios campeonatos de cuerpos de seguridad que se celebran mundialmente cada dos años, y una vez jubilado el gusanillo de la competición no ha disminuido. «El deporte siempre me ha gustado, y ahora que tengo tiempo, más. Siempre he buscado ese mínimo de competitividad». Su deporte base fue el atletismo, y a partir de ahí amplió el abanico. «Con 22-23 años empecé a conocer el mundo de la bici y en 1985 ya había duatlones por Gipuzkoa. Empecé en una de Azkoitia, luego otra en Zumarraga y el salto al triatlón fue en el 88. Era un mal nadador, pero me planteé ese reto, hice un cursillo y participé en el de Zarautz».

A pesar de que la natación es lo último que incorporó, admite que «hoy en día es lo más asequible, es donde menos tiempo pasas. En un Ironman (su primero fue en 1999) pasas como mucho una hora y cuarto en el agua. En la bici son unas seis horas y corriendo pueden llegar a ser cuatro.

En la prueba de Ibiza, el recorrido constaba de tres kilómetros a nado, 118 en bicicleta y 30 corriendo, y aunque «ahora están viniendo los tirones y no las tenía todas conmigo, la tendinitis en el isquio me dejó correr con una pequeña cojera, y terminé a gusto». Tan «a gusto» que fue campeón de su categoría, donde compitieron doce; solo le adelantaron dos de los 30 triatletas de la franja de 60 y 64 años; y en la clasificación absoluta, con los élite, «hice el 153 de unos 500».

Sobre la polémica, explica que «normalmente sí que enseño la ikurriña en carreras internacionales, y hasta ahora no había tenido problemas». Transmite que «lo hago por reivindicar la oficialidad, por darle visibilidad». Además, aclara que «si fuera una semana a Ibiza con todo pagado y me llevan las bicis... Pero para correr esa carrera estoy obligado a hacerlo con el mono de España, y lo tengo que pagar yo. No estoy subvencionado». Mujika disfruta de su pasión de conocer nuevos lugares y competir en triatlones acompañado por su mujer. Próxima gran parada, el campeonato del mundo de Ironman de Niza en septiembre.