La relación entre Sancho y Arrieta: viajes, fiestas, hacerse pareja de hecho, un sueldo mensual...

El programa 'Fiesta de verano' de Telecinco ha confirmado que la Policía tailandesa cuenta con nuevas pruebas que incriminarían directamente al hijo del actor Rodolfo Sancho del asesinato del médico colombiano. Estos nuevos datos aportarían información sobre su relación en los meses anteriores.

En el espacio que presenta Sandra Barneda aseguraron este sábado que el doctor Arrieta estaba planeando irse a vivir con el cocinero de 29 años a España «para formalizar su relación». Carlos Zuleta, amigo íntimo de Edwin Arrieta, afirmó que el colombiano quería que él y Sancho se hiciesen pareja de hecho. «Hablé con Edwin unas semanas antes de su asesinato por el bautizo de mi hija y me contó que tenía pensado mudarse a vivir a España, a Barcelona. De hecho, ya estaba mirando un apartamento para comprar allá», ha señalado. Pero eso no es todo, al parecer el cirujano había iniciado trámites para homologar su título de médico en España con el deseo de abrir clínicas en Madrid y Barcelona.

Asimismo, en el programa de Telecinco desvelaron que el autor confeso del crimen tendría en su poder una tarjeta de débito con hasta 25.000 euros mensuales asociada a una cuenta de Arrieta. Este factor contradice la versión del joven chef, en la que aseguraba que Arrieta le había entregado únicamente 10.000 euros para su restaurante. Cabe destacar que los últimos movimientos de la tarjeta se registraron durante la semana en la que se cometió el crimen en Tailandia. Todas estas pistas revelarían que la conexión financiera entre ambos era mucho más profunda de lo que parecía a simple vista.

Estos días, además, ha trascendido que son muchas las escapadas que han compartido juntos en los últimos meses y que sus allegados no conocían. El pasado mes de febrero, disfrutaron de un día en Segovia montando a caballo y de una cena con amigos en un restaurante muy cercano. Incluso, se conoce que habrían estado juntos en Ibiza previamente a viajar a Tailandia. Además, ambos se encontraban con frecuencia en discotecas de Madrid.

Sin embargo, según la Policía tailandesa, Sancho ha contado una versión de los hechos muy diferente, que dejaría al cirujano como una especie de acosador.«Él estaba obsesionado conmigo. Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo, invertir en la empresa de la cual soy socio. Habló de proyectos juntos, de ir a México, Chile, Colombia, de abrir un restaurante. Pero para él, todo eso era una cortina de humo. Su verdadero deseo era que yo fuera su pareja», confesó el autor confeso del crimen.