Nueva polémica de Miguel Bosé: participa en la charla del curandero que dice que quita el autismo y el sida con lejía

Miguel Bosé se ha visto de nuevo envuelto en una gran polémica. Esta vez se debe a su participación en la conferencia promovida por el catalán Josep Pàmies, el curandero multado por promover el uso del clorito de sodio o dióxido de cloro (MMS), un compuesto similar a la lejía, para tratar el autismo, la fibromialgia o el sida.

La jornada 'Libertad de expresión y libertad terapéutica', está organizada por el grupo 'Dulce Revolución, conocido por sus ataques a la industria farmacéutica y a la Organización Mundial de la Salud. Se celebra en un restaurante de Palma de Mallorca durante la tarde de este viernes y ha sido duramente criticada por el Colegio Oficial de Médicos de Baleares. La Conselleria de Salut, que ya se había posicionado en contra, advierte a los organizadores de que «se vigilará que no se promocionen prácticas no autorizadas». En caso de hacerlo, «se actuará en consecuencia».

«Ya se advirtió recientemente a la ciudadanía de la peligrosidad que conllevan las pseudoterapias médicas, cada vez más habituales y que, en la mayoría de las ocasiones, se aprovechan de la situación de extrema vulnerabilidad de las personas que padecen enfermedades en una situación límite», señala el Gobierno balear en un comunicado.

En el acto hablarán médicos como Nadiya Popel, suspendida por el Colegio Oficial de Médicos por prácticas prohibidas como ofrecer tratamientos alternativos a pacientes con cáncer.

Así, a la polémica que salpica a Bosé por su participación en un evento para promover pseudoterapias, se suma la reciente demanda de su ex Nacho Palau, con el que mantuvo 26 años de relación, por no cumplir la custodia de sus hijos. En declaraciones a la revista 'Lecturas', el exconcursante de 'Supervivientes' asegura que este verano el artista, que reside en México, tampoco ha dejado que sus dos hijos viajen a España para reunirse junto a sus dos hermanos, que viven con Palau.

Tras no conseguir que el juez considerara como hermanos a los cuatro hijos que tuvieron –dos biológicos de cada uno–, el valenciano lucha por pasar sus vacaciones con todos los menores, como indica la sentencia. «El verano pasado, los niños se fueron de vacaciones a Mallorca porque Miguel cogió casa allí. Tenían que haber vuelto conmigo para pasar la mitad del período vacacional en Chelva, pero Miguel no permitió que los hijos que viven con él vinieran conmigo. Mi madre y mi familia se quedaron sin verlos. No me deja ejercer de padre», afirma en la citada publicación.

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