Un cáncer, una operación abdominal y un escándalo fotográfico: los últimos meses de la monarquía británica

En medio de la polémica por la distribución de una fotografía de la princesa con sus tres hijos para conmemorar el Día de la Madre, que claramente estaba manipulada tal y como admitió después el palacio de Kensington, Kate ha sido vista por segunda vez en los últimos días. En las dos ocasiones en contra de su voluntad.

La imagen se produjo este lunes por la noche y fue captada por el diario 'Daily Mail'. En la fotografía en cuestión se puede ver al príncipe Guillermo y a la princesa en la parte de detrás de un vehículo saliendo del castillo de Windsor. Pero la foto no muestra el rostro de Kate. Ella aparece con la cabeza girada completamente hacia el ángulo desde el que se está capturando la instantánea.

Esta es una cronología de los momentos clave en la vida reciente de la princesa que permiten entender un poco más todo este enredo:

Fue el día de Navidad, en la ceremonia religiosa en la iglesia de Santa María Magdalena en Norfolk, Inglaterra. Apareció vestida de azul de pies a cabeza mientras caminaba hacia la iglesia junto a su marido, el príncipe Guillermo, y sus tres hijos, el príncipe Jorge, la princesa Carlota y el príncipe Luis. Middelton lució un abrigo azul real con sombrero a juego y botas altas para lidiar con las temperaturas de estos invernales días de Norfolk.

Tres semanas después, el 17 de enero, el palacio de Kensington anunció que Kate había sido ingresada en la Clínica de Londres para someterse a una operación abdominal. La casa real apenas dio detalles de la intervención, aunque matizó que había sido un éxito y descartó que se tratara de un cáncer. La falta de información clara desató las primeras especulaciones. No había terminado de digerirse esta noticia cuando llegó otra de mayor calado: el rey Carlos III estaba recibiendo tratamiento médico por el agrandamiento de la próstata.

Veinticuatro horas después, el príncipe Guillermo fue fotografiado saliendo en coche del hospital donde su esposa se recuperaba de la operación. Kate cogió la misma puerta dos semanas después para regresar a su domicilio, en Windsor, en las afueras de Londres. La casa real informó que la princesa pasaría la convalecencia en casa, y que tardaría en reanudar sus funciones públicas entre dos y tres meses. Hasta después de Semana Santa no se la esperaba en ningún acto público. Y esta historia rodeada de secretismo avanzaba sin que Kate apareciera en ninguna imagen, sin que trascendiera la auténtica causa de su intervención.

En febrero, al poco de que se sometiera al tratamiento por el agrandamiento de la próstata, la casa real hizo público que Carlos III sufría cáncer. Sin especificar, un cáncer sin 'apellido' aunque no tardó en hacerse público que era de próstata, como ya todo el mundo intuía

El paradero y la recuperación de Kate alcanzó su punto de mayor interés durante la primera semana de marzo. La web 'TMZ' publicó una imagen de muy poca calidad en la que se veía a Kate en un vehículo conducido por su madre. Era la primera vez que se la veía tras su hospitalización. A pesar de que la fotografía circuló libremente por internet, los periódicos y las cadenas británicas la rechazaron con el argumento de que la princesa había solicitado mantener su privacidad durante la convalecencia.

Dos meses después de su operación abdominal, el palacio de Kensington difundió una fotografía oficial en la que se veía a Kate rodeada de sus tres hijos, Jorge, Carlota y Luis. La casa real apenas dio detalles de la imagen, solo contó que había sido sacada por Guillermo una semana antes. La felicidad que mostraban los rostros de sus protagonistas duró poco. Cinco agencias de información internacionales de reconocido prestigio la retiraron al sospechar que se trataba de un mensaje, como acabó por reconocer Kate. El lunes de esta semana la princesa tuvo que pedir disculpas: «Como muchos fotógrafos aficionados, de vez en cuando experimento con la edición. Quería expresar mis disculpas por cualquier confusión que haya causado la fotografía familiar que compartimos ayer».

En medio de la polémica por la distribución de esta fotografía con sus tres hijos, Kate ha vuelto a ser vista. La imagen se produjo este lunes por la noche y fue captada por el diario 'Daily Mail'. En la fotografía en cuestión se puede ver al príncipe Guillermo y a la princesa en la parte de detrás de un vehículo saliendo del Castillo de Windsor. Pero la foto no muestra el rostro de Kate. Ella aparece con la cabeza girada completamente hacia el ángulo desde el que se está capturando la instantánea. Hay que recordar que ayer mismo algunos usuarios de la red social X (antes Twitter) apuntaron a que la cara de Kate Middleton en la foto retocada con sus hijos era la misma que la de la portada que ella misma protagonizó en la revista 'Vogue' en el año 2016.