Alex Pons, de motociclista y modelo con padre famoso a místico antivacunas que recorre el mundo descalzo

Leire Moro

Jueves, 28 de noviembre 2024, 11:04

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Desde que se bajase de la moto en 2017, la vida de Axel Pons, hijo del dos veces campeón del mundo de 250centímetros cúbico, Sito Pons, ha dado varios giros inesperados. Tras siete años compitiendo en Moto 2, donde tras 144 carreras solo consiguió llegar al puesto 16º, abandonó todo: su equipo, su agencia de representación y a su novia. Hasta entonces compaginaba su vida profesional con estudios universitarios y trabajos esporádicos como modelo. Casi siete años después, su antaño pulcro aspecto ha dado paso a unos pies descalzos y negros, unas largas rastas y una frondosa barba. Ha cambiado hasta de nombre. Ahora es Isaac.

El expiloto sorprendió a todos en julio cuando apareció en el canal de YouTube 'Pakistan Tourism' caminando por el país asiático. Fue entonces cuando se supo que llevaba tres años andando descalzo por el mundo. Aseguraba que llevaba 15 meses recorriendo los caminos y carreteras que le han llevado de España a Pakistán. Y que su intención era llegar hasta India, donde no le dieron la visa. «Iremos de vuelta a Islamabad (capital de Pakistán), cogeremos los pasaportes y volveremos para intentar cruzar la frontera en China», explicaba en un vídeo de YouTube publicado en verano. 

India es el país en el que se refugió cuando en 2017 decidió dejarlo todo. En una entrevista a la revista ICON en 2019, el hijo de Sito Pons confesaba que necesitaba «enterrar» al piloto Axel Pons. «También dejé la agencia y a mi novia. Me fui India, lo que me ayudó muchísimo. Iba a buscar otra motivación, otro estilo de vida. Estaba atrapado», reconoció.

En otro de los vídeos, Pons explica el motivo de tan radical cambio: «Empecé a vivir más lento, hasta que empecé a ir por el mundo despacio, apreciando los detalles de la vida. Solo teníamos el deseo de completar la unión con Alá o Dios, y esta es nuestra manera de rezar y practicar: caminando». Durante la pandemia, a través de su Instagram, comenzó a lanzar mensajes antivacunas como que las letras del propio virus querían decir «certificado de identificación de la vacuna» o que estas son «un arma que mata lentamente y diseñadas para destruir la salud». Desde 2021, no publica nada en sus redes sociales.