Aitana confiesa cuál es uno de sus grandes miedos

El documental sobre la vida de Aitana Ocaña está siendo un auténtico éxito en Netflix. Ocupa la lista de lo más visto en la plataforma y está dando mucho que hablar. Desde hace unos días los seguidores de la artista catalana pueden ver cómo se comporta esta en su vida privada en un año en el que su fama se ha disparado a nivel internacional.

Una de las imágenes más curiosas del documental 'Metamorfosis' se puede ver en uno de los primeros episodios. Aitana se encuentra descansando en el hogar familiar donde nació, en San Clemente de Llobregat, cuando decide ir con sus padres a pasear por el centro del pueblo.

Ella misma confiesa a las cámaras que no esperen a una multitud de vecinos pidiendo fotos porque allí todos la conocen y asegura que disfruta de una normalidad que no tiene en el resto de lugares. Pero su idea rápidamente se desvanece cuando empiezan a cruzarse a los primeros niños.

Son muchos los que le piden una foto y Aitana, con una sonrisa en la cara, accede a todas las peticiones. No rechaza ni una. Tanto que acaba costándole una pequeña bronca de su padre Cosme, siempre muy pendiente de ella. «¡Vamos que no llegamos!», le dijo en un tono serio.

Lo cierto es que Aitana quería tomar otro camino para llegar al punto al que se dirigían pero su madre insistió en que debían pasar por la plaza. Es ahí cuando la cantante confiesa que uno de sus miedos es «que la gente piense que quiero llamar la atención». «Esto no forma parte de mí. Me veo como una burbuja en la industria», confiesa.

Aitana hace mucho hincapié en este punto a lo largo de los primeros minutos del documental, e incluso el miedo se apodera de si misma durante la celebración de la Eurocopa en Cibeles, cuando por sorpresa la cantante va a actuar ante las miles de personas que celebran el título de La Roja. «No quiero y me da mucha vergüenza», repite constantemente.