Kobetamendi tuvo el estreno de edición con el que tanto había soñado tras dos veranos en silencio. Una buena ración de pop rock para cortar la cinta del escenario principal, un recital por parte de una de las artistas más aclamadas por el público y ... una rave frenética y poderosa con la que romper a sudar desde la primera canción. Ginebras, Phoebe Bridgers y Zahara arrasaron en tres estilos totalmente distintos, pero perfectamente compatibles.
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Frescura: Las divertidas y reivindicativas letras de la banda son su principal seña de identidad.
DIversidad: «Puedes ser quien quieras ser, querer a quien quieras querer o no querer a nadie», proclamaron.
Inauguración: Fueron las primeras en actuar en el Nagusia, el escenario principal del festival.
«Rogamos que disfruten, salten y muevan el buti», pedía por megafonía el cuarteto femenino Ginebras justo antes de cortar la cinta al escenario principal. Toda una declaración de intenciones para un concierto que fue una oda al buen rollo y el amor libre. Versionaron a Rosalía en una guitarrera y gamberra 'Con altura', divirtieron con su debut 'Todas mis ex tienen novio' y culminaron la fiesta con su hit 'La típica canción'.
Emoción: La artista estadounidense conquistó el corazón de los bilbaínos con su dulzura.
Dueto con una fan: La artista cedió el micrófono a una admiradora situada en la primera fila.
Aclamación popular: Las peticiones en redes de cambiar de horario para disfrutar de su actuación surtieron efecto.
Lo de Phoebe Bridgers en el escenario San Miguel fue una auténtica caricia a los oídos. Angelical y poderosa, la artista estadounidense ofreció la mejor banda sonora para un atardecer de ensueño. Brilló sola a guitarra y voz y hasta cedió el micrófono a una fan. Arrancó con 'Motion sickness' y conquistó gracias a 'Kyoto' durante una actuación que la organización cambió de horario por petición popular a través de las redes sociales.
Disfrute: «Ojalá seais tan libres como nosotros vamos a serlo en el escenario», saludó en euskera y castellano.
Empoderada: Baile, sintetizadores y voz. La artista brilló en todas sus facetas.
Créditos finales: El concierto acabó con la larga lista de profesionales que participan en la gira proyectada en la pantalla.
Y llegó el apoteosis verpertino con Zahara. Explosión de energía desde el primer minuto en una rave que superó todas las expectativas. Este es el cuarto espectáculo distinto que ofrece la artista de Úbeda de su último y mejor trabajo, 'Puta'. Fue una genial sesión de electrónica que concedió un breve descanso con la copla 'Dolores', justo antes de hacer resucitar a Lola Flores con su 'Pena, penita, pena'. No fue el único homenaje del concierto. El público bailó con Taylor Swift y Britney Spears en un bolo que acabó por todo lo alto. La desgarradora 'Merichane', 'Hoy la bestia cena en casa' y 'Berlín U5'fueron el perfecto fin de fiesta para un espectáculo de diez.
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