Urgente Grandes retenciones en la A-8, el Txorierri y la Avanzada, sentido Cantabria, por la avería de un camión
Obituario

Cristian, hostelero del bar Sergio

El hostelero argentino, de la 'Cafetería Sergio' de Máximo Aguirre, falleció en un accidente de moto en Getxo

EL CORREO

Lunes, 21 de marzo 2022

«Bambino, buen viaje». 'Cafetería Sergio', en la calle Máximo Aguirre pero a cuatro pasos de la Gran Vía bilbaína. Apenas seis metros cuadrados gobernados por ti, Cristian, desde las 7 de la mañana y siempre con el más cariñoso de los saludos. «Egunones bambinas/ ... os» y de memoria ponías nuestros cafés, los nuestros y los de todos. Y la mayoría con nombre, porque a todos nos conocías. Nosotros, los de EL CORREO, fuimos de los últimos en incorporarnos a tu fiel clientela de gentes de oficina, comercio y otros menesteres.

Publicidad

En este año largo que compartimos contigo nunca te sacamos de quicio y cruzamos mil chanzas. Cómo olvidar lo orgulloso que estabas de tus tortillas, «cuajadas a lo Cristian» y según tú las mejores de Bilbao. «¡Tortilla perfectoa!», decías con guasa. Como nos confesaste, aprendiste la receta en otro local del Casco Viejo y seguro la mejoraste con tu esmero y dedicación.

Atender en hora punta el bar era todo un ejercicio de sabiduría detrás de la barra. Listo, cariñoso y, como buen argentino, guasón. Pero sin dejar de trabajar ni un segundo. Movías las manos a una velocidad de vértigo. Con qué ilusión nos contabas que ya tenías encargado otro cuerpo para tu cafetera blanca, para que así tus clientes no esperásemos ni un segundo de más por los cafés en la hora punta.

Viniste de Argentina cuando las cosas se pusieron feas. Buscabas un futuro mejor. Estos días, cuando veías las noticias de lo que estaba pasando, la guerra, el precio de la gasolina, la crisis..., se te ensombrecía un poco el rostro. «Quién me iba a decir que me escapé de un corralito y quizás llegue otro», suspiraste el viernes en uno de esos raros momentos en los que no tenías cola de clientes esperando.

Unas mujeres leen los mensajes puestos por los clientes en la cristalera, junto a ramos de flores. AINHOA GÓRRIZ

Hemos visto llorar a muchos de tus clientes delante de la puerta cerrada del local, con flores y mensajes sentidos. «Tiburón, cuánta falta nos vas a hacer». «Gracias por tu alegría y diversión». «Que tengas un buen viaje». Allí donde estés, esperamos que te hayas llevado tu traje de buceo y sigas disfrutando de tu deporte favorito.

Publicidad

Hasta 400 cafés diarios, hasta muchos más cientos de amigos que te hemos perdido con esos vertiginosos 40 años tuyos. Dimos la noticia, pero hasta horas más tarde no supimos que eras tú el fallecido en el accidente de tráfico de Algorta. Aquí, en el edificio Sota, somos muchos los que estamos rotos por tu trágica marcha y allí, donde hayas ido, están de enhorabuena si te dejan hacer los cafés y poner tu mano en la sartén. Hasta siempre, bambino.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad