Zapatero reclama a Bildu que «no pierda tiempo y llame a las cosas por su nombre»

Retrotrayéndose a ese 2011, Zapatero ha insistido desde el atril en la necesidad de que «la línea de reconocimientos» que iniciaron ETA, la izquierda abertzale y su entorno, con la desaparición de la banda, la entrega de sus arsenales y reconociendo el daño causado, «no se interrumpa» ahora y la culmine ahora la coalición soberanista. «Se trata de un servicio a esta democracia plena en la que todos somos libres más allá de lo que piense cada uno sobre lo que sucedió (durante los años de terrorismo)»,ha pedido el expresidente del Gobierno. «Llamemos a las cosas por su nombre», ha insistido, «en julio del 36 hubo un golpe de Estado, el franquismo fue una dictadura horrible, y el terrorismo fue terrorismo».

Zapatero ha reclamado que el próximo 21-A el electorado otorgue su confianza al PSE para agradecer «su tarea por la paz, su servicio a la conviviencia» y su «permanente saber estar» utilizando siempre «las palabras justas» para abordar el final del terrorismo y la etapa posterior. En este nuevo momento considera que «lo que más» necesita Euskadi son «políticas sociales y políticas de convivencia, justo lo que mejor hacemos los socialistas». Incluso ha mirado más allá del domingo para hacer un último augurio: «no sé quién será lehendakari, pero sé que mandará Eneko».

Andueza también está convencido de que su partido tendrá la llave del próximo Ejecutivo, tal y como indican la práctica totalidad de las encuestas realizadas hasta la fecha. «Nosotros y nadie más va a decidir a qué se va a dedicar el próximo Gobierno», ha proclamado el candidato socialista. Es por eso que, quizá pensando en futuras coaliciones, ha llamado a concentrar el voto en su candidatura para que el siguiente lehendakari y su equipo «se centre en lo importante y no haga locuras». «No desperdiciemos ni una papeleta», ha pedido. La llamada es a aquellos votantes que llevaron a la victorial al PSE en las generales del pasado verano y a los «decepcionados» del PNV.

Andueza ha reivindicado su proyecto para que Euskadi «vuelva a ser líder y vanguardia», y ha tomado el guante lanzado por EH Bildu para reabrir en la siguiente mandato la ponencia de autogobierno. Pero no con el mismo objetivo. El candidato del PSE ha reconocido la necesidad de tener «un Estatuto reformado del siglo XXI», pero ha culpado a las formaciones nacionalistas de frenar el proceso años atrás «anteponiendo lo identitario a los derechos sociales».