De gaitas (escocesas) y desencanto

«Soy inglés, nacido en Londres». ¿Qué le había llevado entonces a querer poner tierra de por medio (y una nueva frontera) con sus orígenes?: ¿Un desengaño amoroso? ¿Un desencuentro familiar? ¿Acaso era un huido de la Justicia? «Llevo cinco años en Edimburgo y me quiero quedar. Creo que, económicamente, nos iría mejor con la independencia».

Me desarmó su pragmatismo... y me dio envidia. Tenía una misión en las urnas, igual que la tenían los que, por el contrario, querían mantener el 'statu quo' y a Escocia dentro de Gran Bretaña. Me acordé entonces del entusiasmo de la primera vez que fui a votar, con 18 años, como si aquella papeleta tuviera superpoderes. Hoy afronto la cita del día 21 con desencanto. He sufrido un desengaño... político (no diré por culpa de quién). No ayuda tampoco que la mayoría de los candidatos sean 'nuevos', como si te acabaran de presentar a una cuadrilla que conocías de vista y todos te quisieran invitar a un pote.