José Ramón Bilbao 'Buli'

«Veo poco probable una alianza estable entre Gorroño y el PNV»

Iratxe Astui

Gernika-Lumo

Lunes, 29 de mayo 2023, 18:33

Comenta

José Ramón Bilbao 'Buli' apenas durmió la noche después de la jornada electoral. Eso sí, las pocas horas que le atrapó el sueño fueron reparadoras y suficientes para levantarse al día siguiente «contento» con los resultados de los comicios que daban a su grupo de EH Bildu como la fuerza más votada de Gernika. Compró el pan y el periódico y agradeció las continuas felicitaciones de sus convecinos, además de atender sin descanso las llamadas de los medios de comunicación. Hacía ocho años que la coalición abertzale se tuvo que levantar del primer sillón del Consistorio para dejar asiento al que parecía ser el alcalde 'eterno' de la simbólica localidad vizcaína, José Mari Gorroño, coligado con el PNV.

– ¿Ha sido dura la pelea?

–Más que dura, yo diría que larga. En EH Bildu llevábamos un año preparando la campaña. Hemos trabajado de manera concienzuda, con un programa meditado que nos alegra que haya sido el más valorado por los gernikarras. Ahora estamos en posición de liderar para los próximos cuatro años.

– Pero sin mayoría absoluta

–Los resultados de las últimas elecciones son un ejemplo claro de que Gernika es un pueblo plural y de que no podemos prescindir de ningún grupo político porque todos son una representación del pueblo. Esa es la fotografía que nos han dejado las últimas elecciones municipales en este municipio. A EH Bildu le toca ahora liderar el gobierno local; sí, pero no me gustaría excluir a nadie porque todos y cada uno de los 17 concejales del Ayuntamiento vamos a ser necesarios para consensuar las mejores propuestas y planes para Gernika.

– ¿Ya le han felicitado desde el resto de las formaciones que tendrán representación en la Administración local?.

–Ese mismo día, a las diez de la noche, recibí la felicitación del candidato del PNV, Xabier Irazabal, y también de otros miembros de su partido. De José Mari Gorroño no sé nada, aunque algún candidato de la lista de su plataforma sí que se me acercó para felicitarme, cosa que agradezco.

– Tiene usted fama de ser un hombre conciliador pero también tremendamente confiado. ¿Teme usted ahora un acuerdo entre Gorroño y el PNV para desbancarle?

–No sé lo que va a pasar, ni puedo meterme en la cabeza del resto de los candidatos alcaldables. En campaña, José Mari (por Gorroño) llegó a afirmar incluso que yo iba a pactar con el PNV. Dicho eso, yo no sé qué estarían dispuestos a hacer los demás. En las últimas legislaturas, la forma de gobernar ha sido siempre apartando y silenciando al tercero; es decir a nosotros, y eso no es lícito porque también representamos a una parte del pueblo.

– Pero en política dicen que todo vale…

–De entrada parece poco probable que Gorroño e Irazabal logren hacer una alianza estable y como te decía nuestra intención es abrir las puertas a la colaboración de todos. Ami no me gustan los gobiernos en bloque. A poder ser quisiera que consensuáramos entre todos por el bien del pueblo.

– ¿Qué será lo primero que haga cuando entre al despacho? ¿Ha pensado qué se llevará a la mesa?

–Probablemente abrir las ventanas de par en par para que entre aire fresco. La verdad es que no es una estancia demasiado bonita; creo incluso que habría que simplificarla.Y en cuanto a lo que me llevaría, sin duda, mi ordenador portátil.

–¿Estaría dispuesto a bajarse el sueldo como se lo exigió usted en su momento al alcalde Gorroño?

–Yo no quiero un sueldo mayor al que tengo en mi trabajo como profesor e investigador en la universidad. Lo ideal sería mantenerme como estoy ahora.

–Todo el mundo se pregunta ahora qué pasara con el plan del Museo Guggenheim Urdaibai. ¿Le darán apoyo?

–Los gernikarras sabemos muy poco sobre ese plan. Es una propuesta que quiere llevar a cabo la Diputación, en unos terrenos que le pertenecen, pero poco más. Me gustaría que la nueva diputada general y el consejero de Cultura vinieran a Gernika y se sentarán con el alcalde y explicarán también a los ciudadanos, qué se lo que realmente quieren hacer en la antigua fábrica de Dalia, quién va a poder uso del museo, qué envergadura va a tener... La pregunta sobre si estamos a favor o en contra del Guggenheim Urdaibai nos la hacen siempre pero no tiene sentido posicionarse a favor o en contra si no podemos hacer nada. Es decir, para mí es una pregunta trampa y lo único que logra es polarizar a los ciudadanos sobre algo que nadie sabe aún ni tan siquiera si se va hacer.