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La 'ola sanchista' de las pasadas elecciones generales se dejó sentir de nuevo ayer en Euskadi. Tanto en la costa como, sobre todo, en el interior. A cierre de esta edición, el PSE-EE recibió ayer más de 181.400 votos, 28.000 por encima ... de los que obtuvo hace cuatro años, que le reportaron 228 concejales en Euskadi y 26 junteros. «Hemos demostrado que sabemos recuperar la confianza de los ciudadanos», se congratuló a medianoche su secretaria general, Idoia Mendia.
Los socialistas superaron la noche electoral con nota. Especialmente en Bizkaia y en Álava. Aunque no lograron uno de sus principales objetivos: recuperar Barakaldo. Alfredo Retortillo era la apuesta del PSE para tratar de volver a hacerse con el Ayuntamiento de la localidad fabril, tradicional bastión socialista, después de que hace cuatro años cayera en manos del PNV. No pudo ser. Si en 2015 Barakaldo fue para los jeltzales por 52 votos, esta vez la diferencia la marcaron más de cuatro mil papeletas.
Pese al 'golpe' de Barakaldo, los socialistas guardaron sus fortines en Bizkaia: ocho junteros –sube uno– y 93 concejales, quince más que hace cuatro años. Alfonso Gil logró en Bilbao pasar de cuatro a cinco ediles gracias a experimentar un incremento de más de cuatro mil votos. Tampoco fallaron los candidatos de Portugalete y Ermua. Mikel Torres y Juan Carlos Abascal ('Txitxo'), respectivamente, demostraron un liderazgo inquebrantable. No solo seguirán ostentando las makilas, sino que lograron crecer diez y nueve puntos cada uno, en comparación con los resultados de 2015. El PSE mejora también en Basauri, Sestao y Santurtzi, aunque permanece aún a mucha distancia del PNV.
En Álava los socialistas dieron al traste con las encuestas. Doblaron casi su número de junteros, pasando de cinco a nueve. Y pese a que todos los sondeos dejaban al PSE fuera de los tres primeros puestos en el Ayuntamiento de Vitoria, el partido que lidera Idoia Mendia pasó de cuatro a seis ediles –los mismos que EH Bildu y solo uno menos que el PNV–, convirtiéndose en segunda fuerza. Los socialistas volvieron a ser la lista más votada en Iruña de Oca. No así en Moreda de Álava, donde ganó el PNV.
En Gipuzkoa, por contra, los resultados dejaron un sabor amargo en el PSE. El partido se volcó durante la campaña en este territorio histórico con el desembarco de sus principales espadas. Pero no logró su objetivo. Los socialistas ganaron en las localidades de Irún, Eibar, Lasarte y Zumarraga. Pero el Ayuntamiento de San Sebastián sigue resistiéndose. En la pugna con el jeltzale Eneko Goia perdieron dos concejales –de siete a cinco– y retrocedieron hasta la tercera 'casilla' del Consistorio, por detrás de PNV y EH Bildu. Tampoco lograron recuperar Rentería y Andoain, que seguirán en manos de la coalición abertzale. Y perdieron en Pasaia. El PSE mantuvo sus nueve junteros en Gipuzkoa.
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