«Queremos retomar el músculo industrial en Barakaldo y no ser sólo una ciudad de servicios»

- ¿Ha sido complicada la relación con el PSE, su socio de gobierno?

- Ha tenido claroscuros, pero siempre he defendido los pactos. Nuestra obligación es buscarlos más allá de los intereses partidistas, pensando en los baracaldeses. Y vista la pandemia, menos mal que teníamos ese pacto.

- Se mantienen muchos nombres en la papeleta electoral.

- Hay novedades, porque es un equipo que sigue creciendo. Quiero poner en valor la juventud y la experiencia personal y profesional que aportan. No tengo duda de que todos se van a dejar la piel trabajando por su pueblo.

- Han anunciado la instalación de cámaras en Cruces. ¿Hay menos seguridad en la zona?

- La sensación de seguridad es algo que siempre nos preocupa y hay que dar pasos para mejorarla. En ese sentido, las cámaras han demostrado ser una herramienta eficaz, como ocurrió en Burtzeña, por eso lo vamos a hacer en otras zonas, con la colaboración de todas las asociaciones.

- Estos años han sido reiteradas las movilizaciones de los trabajadores. ¿Han faltado acuerdos?

- Siempre hemos estado abiertos al diálogo y a respetar los derechos de los trabajadores a sus reivindicaciones. Están abiertas las mesas de negociación y se han aprobado todas las subidas e incrementos que permite la ley.

- Se han multiplicado los proyectos urbanísticos. ¿Puede complicar esto la subida de precios?

- Barakaldo ahora mismo está lanzado hacia el futuro. Hemos recuperado la velocidad que teníamos antes de la pandemia, y es verdad que se han encarecido los costes, como ocurre con el parque Zamalanda, que no solo nos permitirá mirar a la ría, sino tocar el agua con un espacio de referencia para el ocio familiar de 90.000 metros cuadrados. Esto lo paga Bilbao Ría 2000, y no es que nos lo regalen, es que nos lo merecemos. Y quiero hacer un paréntesis para poner en valor la colaboración interinstitucional que ha traído grandes beneficios a Barakaldo, con una inversión superior a 50 millones de euros.

- También se han dado pasos, a través de derribos, hacia el parque empresarial de Burtzeña. ¿Se quiere recuperar el antiguo músculo industrial?

- Sin ninguna duda. Barakaldo ha vuelto a redefinir su modelo económico, y queremos recuperar el músculo industrial y no ser sólo una ciudad de servicios, aunque el comercio y la hostelería son y serán un motor económico importante de la ciudad con más de 8.600 puestos de trabajo. Pero el parque empresarial es importantísimo para Barakaldo y para la comarca. Es un suelo complicado, porque está contaminado y porque cuando llegamos a la Alcaldía era privado. Hoy en día el 97% está ya en manos de administraciones públicas. Y contamos con el plan estratégico comarcal con 6 millones de euros para la descontaminación de suelos industriales y ponerlo en valor. Ése era el espaldarazo definitivo que necesitábamos.