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El 23% de los ciudadanos vascos tiene estudios universitarios. En cambio, como muchas otras veces ocurre, estos datos no se ven reflejados en la clase política. Entre los candidatos a la Alcaldía de los diez municipios más poblados de Bizkaia, el 90% ha pasado por ... la universidad.
Las carreras 'de letras' destacan como las elegidas por los cabezas de lista. María Silvestre, catedrática de Sociología en la Universidad de Deusto, asegura que es habitual que quienes han recibido una formación cercana a las Ciencias Sociales se acerquen a la política institucional. «Otro de los factores que influye es la desafección que puede haber en profesiones más liberales », añade Silvestre.
Derecho, Magisterio y Periodismo destacan a partes iguales entre la formación que han recibido estos cabezas de listas. Sin embargo, se distribuyen de manera dispar entre los partidos políticos. Los estudios de Derecho son los más transversales. Aunque tienen más presencia entre los candidatos del PP, copan las listas de todas las candidaturas. De hecho, tres de los cinco candidatos de los grandes partidos a la Alcaldía de Bilbao (Juan Mari Aburto, Esther Martínez y María del Río) han estudiado esta carrera.
Magisterio destaca entre los candidatos de EH Bildu y Periodismo entre los de Podemos
Tres de los cinco principales candidatos a la Alcaldía de Bilbao tiene la carrera de Derecho
En el caso de EH Bildu, la docencia destaca como la actividad laboral a la que recurren sus principales candidatos. Cuatro de sus diez cabezas de lista se dedican a dar clases. En Elkarrekin Podemos, en cambio, sobresalen los periodistas. Otros cuatro de sus principales alcaldables lo son.
Silvestre especifica que es habitual encontrar entre la clase con formación universitaria personas más interesadas por la política que en el resto de la sociedad. «Quienes han ido a la universidad habitúan a tener más formación, compromiso y tiempo para implicarse en la vida comunitaria», especifica.
«De todos modos, tenemos que ser conscientes de que vivimos en un territorio en el que la gente que ha pasado por la Universidad está por encima de la media », sentencia Silvestre.
Mañana no habrá elecciones municipales en Isaba, Burgi ni en Burguete. Tampoco en Urzainki, Hiriberri y Zubieta. Y así hasta completar una lista de 37 municipios navarros en los que no se presenta ninguna plancha electoral. De esta manera, solo habrá papeletas para votar a los miembros del Gobierno foral.
En los casos en los que nadie concurre a los comicios, se prevé que en seis meses se vuelvan a repetir las elecciones. En el supuesto de que tampoco hubiera una lista de candidatos dispuesta a gobernar el pueblo, una gestora conformada por la Diputación se encargaría de dirigirlo.
«Es una pena. Vivimos en una sociedad individualista en la que a la gente le cuesta tomar compromisos», explica Carlos Anaut, actual alcalde de Isaba en funciones.
«Tendremos que hacer un llamamiento para que se presente una lista en los próximos meses», asegura. Anaut explica que él deja la Alcaldía porque cree necesario que las nuevas generaciones den un paso al frente para gestionar el pueblo. «He sido dos veces alcalde, ahora como jubilado y cuando trabajaba. Y antes era mucho más incómodo», cuenta para animar a sus vecinos.
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