La pugna nacionalista por Álava

M. PECIÑA

Con el Antzoki y la depuración del Nervión como eternos retos, la Alcaldía de Llodio ha ido rotando entre EH Bildu -o sus diferentes marcas- y el PNV durante toda la democracia. Los jeltzales aspiran a recuperar una makila que no tocan desde hace ocho años, precisamente cuando la consiguió Natxo Urkixo, ahora de nuevo aspirante abertzale. Una candidatura popular, Omnia, desequilibró el mapa electoral a partir de 2011 y llegó a conseguir cuatro ediles en 2015, capitalizando el voto de Podemos, que no se presentó entonces. En esta ocasión sí lo hace y el pleno podría fragmentase aún más, con un PSE, además, al alza.

Pero la principal pelea se dará entre los dos partidos nacionalistas, que se baten el cobre en un estrecho margen. Hace cuatro años obtuvieron los mismos ediles -cinco- y les separaron 450 votos. Hace dos semanas, los de Ortuzar -que estrenan candidato, Ander Añibarro, exdirector de Juventud del Gobierno vasco- resultaron vencedores. Las urnas decidirán sobre la gestión de Urkixo.

M. P.

En Amurrio, la rotonda de la gasolinera podría ordenar el tráfico en el centro a lo largo de la próxima legislatura, en la que aspira a repetir como alcaldesa Josune Irabien tras ocho años en el cargo. En este tiempo, pocos asuntos conflictivos han salido al debate público. Incluso EH Bildu ha posibilitado con su abstención la aprobación de los últimos presupuestos hace unos días y la sensación que se ha transmitido es de 'buen rollo'.

La coalición abertzale apuesta por un candidato nuevo, Iñaki Ibarluzea, portavoz desde 2016, tras la salida de Eva Blanco a la vicepresidencia del Parlamento vasco. La lista conserva pesos pesados, como Luis Mariano Álava, teniente de alcalde con el histórico Pablo Isasi. Orain Amurrio concurre desvinculado de Podemos, que le dio cobertura en 2015, y ahora es un grupo independiente, el segundo en el tablero político local junto a Guk Bai. El PSE ha tenido que recurrir al exjuntero David Romero para encabezar la lista y el PP tendrá que repartir votos con Vox en la localidad natal de su fundador, Santi Abascal.

J. C. BERDONCES

¿Quién sustituirá a Iñaki Beraza en la Alcaldía de Salvatierra? Es la gran pregunta que se hacen en la Llanada una vez que el 'eterno' regidor, que ha tenido la makila 28 años y ha sido jefe de la oposición otros cuatro, no sigue en la arena política.

La pugna que tienen PNV y EH Bildu, que en las dos últimas elecciones han sido las únicas formaciones que han logrado representación en el Ayuntamiento, se prevé aún más apasionante e incierta, no solo por ausencia de Beraza sino también porque habrá dos concejales más en juego -de 11 a 13- al haber rebasado Agurain los 5.000 habitantes.

Una vez superado el plan de viabilidad presupuestaria y financiera para hacer frente a una deuda viva de 9,6 millones, ahora en el municipio preocupa sobre todo el proyecto del Tren de Alta Velocidad, al que también se ha opuesto el PNV de Beraza pese a que la formación jeltzale apoya la obra. 350 votos de diferencia le sacó en los comicios de 2015 a EH Bildu pero en 2011 la mayoría absoluta la logró EH Bildu por 7 votos.

J. C. B.

Javier Martínez cogió la makila de Iruña de Oca en 2004, tras la inhabilitación del entonces alcalde Manuel Rivas (PNV), y no la ha soltado desde entonces. Es el bastión socialista en Álava y su candidato es el mejor colocado para revalidar el triunfo. Aunque gobierna solo con cuatro de los once concejales, ha podido sacar adelante todos los presupuestos de la legislatura gracias al apoyo del PP y los tres últimos también con el voto favorable de la coalición de izquierdas Irabazi. El PNV ha optado por la abstención y únicamente EH Bildu, principal 'azote' del PSE, ha estado votando en contra de las cuentas municipales.

El municipio sigue creciendo en población, en una tendencia ascendente desde 2013, pero también en infraestructuras dada su ubicación en el entorno de la autovía A-1 Madrid-Irún. Nuevos proyectos empresariales como el centro logístico de Lidl o de servicios como el parque de bomberos impulsan una localidad que también 'vive' en gran medida de su cercanía a Vitoria.

J. C.B.

De los 15 ayuntamientos que tiene la comarca vinícola, en nueve gobierna el PNV. No está entre ellos Laguardia, que es junto a Oion la localidad de referencia en Rioja Alavesa y que cuenta con un alcalde del PP desde 2011. De hecho, los populares tienen aquí su fortín en el territorio y aspiran a retenerlo con un candidato nuevo, el joven César García de Olano, hijo de quien también fuera regidor del municipio y que falleció en 201o. Los jeltzales, igualmente, cambian de aspirante y han optado por Lucio Castañeda, un vecino de Laguardia ya jubilado.

La batalla por la makila parece que la dirimirán ambas formaciones aunque EH Bildu tuvo en 2015 casi el mismo número de votos que el PNV. El PSE, mientras, busca entrar en el pleno y para ello ha hecho una renovación absoluta en la plancha, con siete de sus nueve integrantes como independientes. El atractivo turístico de Laguardia, una vez superado el plan de rescate, y la llegada de nuevos proyectos bodegueros hacen de esta villa un claro objeto de deseo electoral.