La importancia de la actitud

Cada fin de año acostumbramos a hacer balance e idear nuestras ilusiones para el nuevo ejercicio. El ritual de proyectar el futuro inmediato tiene algo de intención performativa, como si la propia enunciación de esos proyectos contribuyera a que se materializaran. Quizá les sorprenda leer ... de alguien como yo, centrado profesionalmente en las finanzas y la economía que, más allá de las cuentas de resultados y balances, cada vez considero más imprescindible las actitudes. Actitudes como el temple, en estos tiempos de aceleración y tomas de decisión frecuentemente precipitadas. Actitudes como la colaboración, tan necesaria en sociedades y economías de escalas como la vasca. Actitudes como la generosidad, que antepongan los objetivos compartidos a los protagonismos y que muestren que la profesionalidad no está reñida con la integridad personal. Juntos siempre podremos más y siempre podremos mejor. Y valoro cada vez más actitudes como la mirada en el medio y largo plazo.