Salir a tiempo de un negocio, aunque sea a pérdida, puede suponer un gran triunfo y un elemento de competitividad para el conjunto de un grupo industrial. Así lo hizo ver ayer el director financiero de Vidrala, Raúl Gómez Merino, en su exposición por videoconferencia ... en el Foro MedCap que organiza anualmente la sociedad Bolsas y Mercados Españoles (BME). Explicó cómo en 2019 vendieron su filial de Bélgica porque no era competitiva, lo que al final ha reforzado la solvencia financiera del grupo vidriero: «La vendimos asumiendo pérdidas, pero si esa venta no se hubiera producido, hoy nos estaría dando algún quebradero de cabeza y probablemente hoy esa operación no hubiera sido posible».
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Vidrala, que tiene su sede y principal factoría en la localidad alavesa de Llodio, cuenta en la actualidad con ocho plantas productivas repartidas entre España, Portugal, Reino Unido, Irlanda e Italia. En ellas trabajan unas 3.700 personas y facturan en total más de 1.000 millones. En 2007 adquirió una fábrica en la localidad belga de Ghlin (MD Verre), pero a pesar de modernizarla no consiguió rentabilizarla, en parte por sus altos costes laborales, y decidió salirse. En diciembre pasado la compró el grupo francés Saverglass por dos euros y generó una minusvalía de 5 millones a Vidrala.
El director financiero de Vidrala especificó en su intervención que «para mí resiliencia es tener unidades productivas competitivas, bien ubicadas, bien escaladas y bien invertidas», y esos principios les están ayudando a hacer frente a la crisis del Covid-19.
Tras detallar todas las medidas adoptadas para producir en condiciones de seguridad sanitaria, reiteró que al ser un sector esencial de la cadena alimentaria, no han dejado de producir. Raúl Gómez admitió que «nadie es inmune» a los efectos económicos de esta pandemia -el sector Horeca quedó paralizado-, pero señaló que llegan «con una posición financiera sólida» y con el endeudamiento más bajo en cinco años.
En base a las cuentas del primer trimestre de este año, Vidrala tiene una liquidez de 223 millones, mientras que la deuda se redujo hasta los 313,1 millones. El grupo estima que su diversificación geográfica y el estar encuadrado en el sector de alimentación mitigará los efectos de la crisis.
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Otra compañía con sede vasca que participó ayer en el Foro MedCap fue MásMóvil. Su consejero delegado, Meinrad Spenger, restó relevancia a la irrupción en el mercado de Virgin Telco, marca con la que Euskaltel ha decidido expandirse al resto de España. Spenger señaló que en el mercado hay otros muchos competidores que han copiado su estrategia multimarca y lanzado agresivas ofertas con descuentos de hasta un 50% y aun así, recalcó, en los últimos dos años ha sido MásMóvil el operador con mayor crecimiento.
Precisamente ayer se conoció que quien fuera director económico y financiero de Euskaltel entre 2014 y su despido junto a otros directivos el pasado enero, Jon Ander de las Fuentes, ha sido fichado por MásMóvil para el consejo de administración de su nueva filial vasca, Guuk, cuya puesta en marcha está prevista para antes del verano, informa Julio Díaz de Alda. De las Fuentes, responsable económico además en la directiva del Athletic, competirá así con su anterior empresa.
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143 millones ganó Vidrala en 2019, año que tuvo una minusvalía de 5 millones por la venta belga.
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