El nuevo Renove rebaja a 1.000 euros las ayudas por coches de gasolina y gasóleo

El reajuste de las ayudas por coche, con rebajas en todos los casos salvo en los eléctricos puros y los enchufables, tiene por objeto duplicar el número de coches subvencionados respecto a la edición anterior, desde los 2.500 hasta los 5.000. Así lo han explicado esta manaña el director general del Ente Vasco de la Energía (EVE), Iñigo Ansola, y el viceconsejero de Industria, Javier Zarraonandia. «Nuestra meta es sacar de las carreteras el doble de coches contaminantes para sustituirlos por otros nuevos», han afirmado. El presupuesto es el mismo, cinco millones de euros, y en 2019 se agotó en apenas tres meses.

En todos los casos se exigirá a los particulares el achatarramiento de un vehículo de más de 10 años de antigüedad, tal como se requería en el plan de 2019. Para evitar movimientos de última hora, se exigirá que el solicitante de la ayuda sea titular del coche viejo que se retira desde el 1 de enero de este año.

Como ya avanzó este periódico, el Gobierno vasco ha acelerado todos los trámites lo máximo posible para atender la demanda del sector, que le había avisado del efecto negativo de haber anunciado el nuevo Renove a finales del año pasado, durante la tramitación de los Presupuestos para 2020. Los concesionarios advirtieron de que los ciudadanos iban a paralizar cualquier decisión hasta que se activasen las ayudas.

Así que una vez aprobados los Presupuestos con el apoyo de Elkarrekin Podemos, el Gobierno vasco ha agilizado todo el proceso y las ayudas se pueden solicitar desde mañana, un día después de su publicación en el Boletín Oficial del País Vasco, coincidiendo con la jornada de huelga general.

El nuevo Renove coincide con el anterior en el sentido de que no excluye a los nuevos motores de gasolina y diésel. «Somos la única comunidad con un plan de achatarramiento que subvenciona todas las tecnologías», ha dicho hoy Zarraonandia. Esa posición del Gobierno vasco ha sido muy aplaudida por el sector, que en cambio se mostrado muy crítico con la incertidumbre generada por el Gobierno de Pedro Sánchez en torno al diésel; y que de nuevo vuelve a suscitar gran preocupación con el anuncio de subidas impositivas a este combustible y limitaciones circulatorias en ciudades de más de 50.000 habitantes.

Pese a mantener las ayudas para todos los motores, las rebaja a la mitad en el caso de la gasolina y gasóleo. En el anterior Renove, gracias al que se sustituyeron 2.411 vehículos viejos por otros nuevos menos contaminantes, esta tipo de motores acapararon el mayor número de solicitudes. En concreto, el 62,5% del total seguidos de los híbridos no enchufables (18,8%) y de los GLP (11,5%).

Estas dos últimas modalidades también han experimentado recortes en las ayudas. Los híbridos no enchufables, cada vez más demandados, pasan de 2.250 euros a 1.500 y los de GLP de 2.250 a 1.000.

El Renove de 2019 logró impulsar las ventas durante tres meses, de marzo a mayo, pero no impidió que las matriculaciones cayeran un 4,6% en el año, el primer descenso desde 2012. Y es que la incertidumbre sobre qué tipo de vehículo comprar, ante las dudas sobre el diésel, está frenando las adquisiciones.

Este año también se presenta complicado para los concesionarios puesto que el 1 de enero entró en vigor una nueva regulación que obliga a los fabricantes a que la media de los coches vendidos no supere los 95 gramos de emisión de dióxido de carbono. Si no cumplen se exponen a importantes sanciones y eso les obliga a vender más eléctricos y también más diésel, que emiten menos CO2 que los gasolina.

El sector ha recibido bien el plan, sobre todo por la urgencia con la que se ha aprobado. Jon Lekue, presidente de la Asociación de Concesionarios de Bizkaia, considera muy positivo el apoyo a los eléctricos en un año en el que van a ser clave dada la entrada en vigor la nueva regulación sobre las emisiones de dióxido de carbono. «Su precio es todavía elevado y poco accesible para la mayoría de usuarios», dice y constata que el arranque de este año 2020 estaba siendo muy flojo. En la misma línea Jon Tolaretxipi, de Easo Motor, aplaude el programa pese al recorte en gasolina y gasóleo dado que «todos los fabricantes tenemos una mayor oferta de vehículos electrificados este año».

Entienden además que el objetivo del Gobierno Vasco al reducir la cuantía de las ayudas es que se compre un mayor número de coches que la anterior edición , al mantenerse el presupuesto total en 5 millones de euros.