El pasado año sólo diez de cada cien clientes compraron un coche híbrido -en cualquiera de sus dos versiones, convencional y enchufable- o eléctrico en España. Sin embargo, para 2025 se espera que más de la mitad de las ventas (concretamente, el 55%) ... corresponda a este tipo de vehículos. Son los cálculos de la consultora MSI para Sumauto, especialista en portales verticales de automoción que agrupa a Autocasión y AutoScout24, entre otros. Un espectacular incremento de la cuota de mercado que el estudio achaca al plazo marcado por la Unión Europea para que los fabricantes reduzcan las emisiones de toda su flota en un 15% en comparación con los niveles de 2021.
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El informe de Sumauto prevé que para 2025 los vehículos híbridos alcancen una cuota del 40% de las ventas en España, casi tres veces más que la de los eléctricos, que representarán el 14,5%. El impulso de este tipo de coches podría ser mayor «de solventarse la diferencia de precio con respeto a los de combustión tradicional». En el caso concreto de los eléctricos, las ventas serán aún mayores de las previstas si se mejora en las infraestructuras de recarga, la volatilidad de las baterías, y el tiempo medio que tardan en cargarse.
El pasado ejercicio se cerró con significativos aumentos en las ventas tanto de híbridos como de eléctricos. Algo habitual en los últimos ejercicios teniendo en cuenta el aún reducido volumen de unidades que mueve este segmento del mercado. El número de eléctricos puros matriculados alcanzó la cifra de 10.050 unidades, lo que representa un aumento interanual del 64%. Sin embargo, sólo supusieron el 0,80% de cuota de mercado.
En cuanto a los híbridos enchufables (combinan el motor de combustión con una batería eléctrica que se carga mediante un enchufe conectado a la red), se matricularon 7.425 unidades, lo que representa un aumento interanual del 30,65%. El porcentaje sobre el total de turismos y todoterrenos vendidos fue del 0,59%. Por último, los híbridos convencionales (los no enchufables) cerraron el año con 108.648 entregas, un 43,4% más que el año anterior. La cuota de mercado alcanzó el 8,64%. En total, las ventas de híbridos y eléctricos llegaron hasta las 27,230 unidades, con una cuota de mercado del 10%.
Arancha Mur, directora de Economía y Logística de Anfac, aseguraba respecto a las ventas del pasado año que los vehículos alternativos «han cogido peso en cuanto a cuota de mercado, mientras que la de combustión de gasolina se estancó en el último trimestre». Respecto a las ventas de vehículos eléctricos puros, «aunque han mejorado su cuota, siguen avanzando de forma muy lenta». Por eso alertaba sobre la necesidad de «impulsar planes de ayuda que sean efectivos y con una dotación que les permita tener continuidad en el tiempo».
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El informe de Sumauto señala que el crecimiento de la motorización eléctrica será «progresivo» e irá en paralelo «al despegue del vehículo autónomo», que apenas representará el 0,1% de las ventas este año, «pero que alcanzará el 7,3% en 2025, lo que supone la mitad de las matriculaciones de coches eléctricos».
Además, el desarrollo del coche autónomo llevará al 'carsharing' (uso temporal de vehículos) «a alcanzar su máxima expresión, lo que permitirá disponer de un transporte público sin conductor a demanda sin horarios rígidos ni líneas preestablecidas», principalmente en ciudades con más de 200.000 habitantes.
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Por otro lado, la «democratización» de estas nuevas fórmulas de movilidad y los avances tecnológicos «impulsarán la irrupción del coche conectado». Según los autores del estudio, en 2025 el 70% de los coches dispondrán de esta tecnología y «estarán conectados entre sí, con las infraestructuras de tráfico, los talleres, concesionarios, etc.». En este contexto, se prevé que en diez años el negocio generado por los vehículos conectados «iguale a toda la facturación de la posventa, más de 14.000 millones de euros», según datos de Solera, empresa de soluciones para el vehículo.
A juicio del director general de Sumauto, Nicolás Cantaert, «la apuesta por la nueva movilidad traerá consigo el crecimiento del coche conectado, lo que proporcionará un gran volumen de información al mercado». En el caso de los concesionarios y establecimientos de compraventa «esto dará lugar a nuevos modelos de negocio con los que competir, y a los que deberán adaptarse apoyándose en expertos en el manejo de los datos. Pero que tengan no sólo las cifras, sino también un histórico, capacidad de análisis y conocimiento del usuario. Eso es lo que marcará la diferencia».
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