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En España la venta de coches eléctricos no termina de despegar, o no al ritmo en que lo hace en otros países europeos, y la infraestructura de recarga también se extiende a un ritmo demasiado lento. De ahí que esté a la cola de Europa, según el último Barómetro Anfac de la Electromovilidad, que cada trimestre pone nota a los avances de la movilidad eléctrica en España y cada una de sus comunidades autónomas. Euskadi flojea en la penetración del vehículo eléctrico y, aunque el ratio de electrolineras/habitantes tampoco es como para presumir, sí que dispone de una buena red de recarga rápida.
El Barómetro Anfac es un índice (con base 100) que valora el nivel de cumplimiento por parte de las autonomías de una serie de objetivos: alcanzar un 10% de cuota de mercado de vehículo electrificado, un 70% de penetración de vehículo puro respecto al electrificado (en esta categoría entran los híbridos enchufables); el volumen de puntos de recarga necesarios para lograr ese objetivo (3,3 puntos por cada 1.000 personas en 'edad motorizable'), y que el 30% de esas infraestructuras sean de recarga rápida o superrápida.
Con todos estos elementos la patronal de fabricantes lleva a cabo una valoración, de manera que la cifra 100 representa el «total cumplimiento de los objetivos». En esa escala, y en función de los diferentes grados de alcance de esos objetivos, se otorga un valor o nivel a cada territorio.
El indicador global crece 0,9 puntos respecto al trimestre anterior. Euskadi, con 18,1 puntos, ocupa la tercera posición en el ranking sólo por detrás de Cataluña (24,2 puntos) y Madrid (21,1). Respecto al anterior trimestre, la comunidad autónoma vasca avanza apenas 0,3 puntos.
En lo que se refiere a la penetración del vehículo electrificado (porcentaje de eléctricos que se venden sobre el total), se observa una tendencia creciente que es generalizada en casi todas las comunidades autónomas. Sin embargo, en este aspecto Euskadi no ocupa una posición tan destacada. El índice le otorga sólo 16,2 puntos sobre 100, por lo que se sitúa en la octava plaza, muy lejos de los 25,8 puntos de Madrid o los 22,2 de Cataluña.
Y eso que hasta el mes de agosto en Euskadi se vendieron 581 vehículos eléctricos, un 113,6% más que en el mismo periodo del año anterior. Fue la sexta comunidad autónoma donde más se incrementaron las matriculaciones de este tipo de automóviles. Sin embargo, suponen poco más del 2% del total de coches vendidos en el territorio.
En cuanto a la presencia del vehículo eléctrico sobre la población susceptible de conducir un coche (lo que el informe llama 'población motorizable'), Euskadi se sitúa en mitad de la tabla, con 2,2 puntos, prácticamente igual que en el Barómetro anterior. Está lejos de la media nacional (3,8 puntos), que sin embargo está condicionada por la gran penetración del vehículo eléctrico en la población madrileña (13,2 puntos). No obstante, Anfac destaca el «mal comportamiento» de este indicador durante el primer trimestre del año debido al impacto negativo de la Covid-19 en la matriculación de vehículos.
Otro aspecto analizado es la cuota de coches eléctricos puros sobre el resto de tecnologías electrificadas. Aquí el retroceso es general, y revela un creciente interés de los usuarios por los híbridos e híbridos enchufables en detrimento de los 'cero emisiones'. Euskadi ocupa la octava posición del ranking, mejorando notablemente respecto al segundo trimestre del año pasado (decimotercer lugar).
Además de las ventas, la otra gran pata del barómetro de Anfac se refiere a la infraestructura de recarga, clave para el despegue del mercado. En España hay casi 7.900 puntos de públicos de recarga, de los que 285 están en Euskadi. La patronal de fabricantes cree que el despliegue de estas redes «es claramente insuficiente». Los puntos existentes «distan mucho» del objetivo mínimo de 110.000 puntos para 2025 establecido en el Informe Anfac Automoción 2020-2040. Se trata de un «punto crítico» en el despliegue del vehículo eléctrico.
Sin embargo, en este apartado Euskadi presume de estar sólo por detrás de Cataluña y Aragón. Aunque está por debajo de la media en número de postes de recarga en relación con los habitantes, se encuentra en quinta posición en el listado de comunidades con mayor infraestructura de recarga rápida.
Anfac lamenta que las debilidades de la red de recarga son más notorias a medida que aumenta la potencia. Destaca que «apenas el 5%» de los puntos públicos permite una carga de, al menos, 40kW. En Euskadi ese porcentaje es del 6,6%. Además, en la comunidad autónoma vasca -concretamente, en Álava- se encuentran 4 de los 18 puntos recarga ultrarrápida de España, aquellos que permiten llenar las baterías en menos de 15 minutos.
Otra debilidad del sistema, según la patronal de fabricantes, es que en España «apenas el 35% de la infraestructura de recarga es interurbana». En el caso de Euskadi, casi alcanza el 40%.
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