Qué es y cómo se accede al Kit Digital que da 1.000 euros a los autónomos para comprar un ordenador

Las pequeñas empresas y los autónomos pueden beneficiarse del Kit Digital, una iniciativa del Gobierno para subvencionar la implantación de soluciones digitales como la creación de páginas web, la implantación de la factura electrónica o el refuerzo de la ciberseguridad, entre otras.

El programa, gestionado por el ente público Red.es -adscrito al Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública- cuenta con un presupuesto de 3.067 millones de euros y está financiado por la Unión Europea a través de los fondos NexGenerationUE.

Desde su puesta en marcha en noviembre de 2021, el Gobierno ha lanzado varias convocatorias. La última de ellas, presentada hace unos pocos días, incluye una interesante novedad: la posibilidad de obtener una ayuda pública de 1.000 euros para comprar ordenadores con unas determinadas características técnicas.

Es un programa que concede un bono digital con una cuantía económica para que el beneficiario lo administre escogiendo una o varias soluciones digitales ofrecidas por los llamados «agentes digitalizadores», que son empresas o profesionales proveedores de servicios tecnológicos.

La cuantía del bono digital va desde los 3.000 euros para microempresas (entre 0 y menos de 3 empleados) y autónomos, y los 12.000 reservados a pymes de entre 10 y 50 trabajadores.

La última modificación de la orden de bases ha ampliado el campo de beneficiarios, estableciendo dos nuevos segmentos: el formado por empresas de entre 50 y menos de 100 empleados (que pueden optar a una ayuda de 25.000 euros), y el compuesto por compañías de entre 100 y menos de 250 trabajadores (con 29.000 euros de ayuda).

Esta modificación incrementa además en 1.000 euros la ayuda de 2.000 dirigida a autónomos y microempresas. Se trata de un aumento con carácter retroactivo. Es decir, que los beneficiarios que hayan solicitado ya la ayuda, e incluso consumido su bono digital, podrán pedir la ampliación de 1.000 euros a partir del próximo mes de junio.

El Kit Digital está abierto a los pequeños empresarios y trabajadores autónomos de cualquier sector profesional que cumplan con las condiciones establecidas en las bases de convocatoria.

Estos requisitos tienen que ver, entre otros aspectos, con el tamaño de la empresa y sus límites financieros. Además, el beneficiario debe estar en situación de alta y acreditar una antigüedad mínima, y estar al corriente de las obligaciones tributarias y frente a la Seguridad Social.

Los potenciales beneficiarios están divididos en segmentos en función del número de empleados. En la actualidad hay cuatro convocatorias del programa activas en paralelo. Por ahora pueden acogerse las empresas y autónomos con menos de 50 empleados. Próximamente entrarán las medianas empresas.

Los potenciales beneficiarios deben registrarse en una página web y completar un test de autodiagnóstico. Esta prueba permite a la administración conocer el nivel de digitalización de la empresa o autónomo para poder recomendarle servicios ajustados a sus necesidades.

Una vez consultado el catálogo de soluciones digitales, se podrán escoger una varias de las ofrecidas por los agentes digitalizadores. Por último, hay que solicitar la ayuda en la sede electrónica de Red.es completando todos los pasos del formulario.

El siguiente paso consiste en acceder al catálogo de agentes digitalizadores y elegir con quién o quiénes se quiere desarrollar la solución digital. Una vez puestos en contacto, es obligatorio suscribir el acuerdo de prestación de soluciones digitales.

Entre ellas está la posibilidad de mejorar la página web de la empresa y su presencia «básica o avanzada» en internet, gestionar las redes sociales, reforzar la ciberseguridad, implantar la factura electrónica, ampliar la gestión de los clientes, u ofertar servicios y herramientas mediante una oficina virtual.

La modificación de la orden de bases del Kit Digital actualiza el catálogo de soluciones de digitalización y crea una nueva, llamada 'Puesto de trabajo seguro', dirigida a autónomos y microempresas. Incluye la posibilidad de adquirir un dispositivo 'hardware' (ordenadores portátiles o de sobremesa nuevos) con unos mínimos requisitos de almacenamiento, procesador, memoria RAM, y sistema operativo.

Debe tener integrado «en el producto y en el precio» una licencia que cumpla con determinados requisitos de ciberseguridad, «además de un encriptado/cifrado en reposo, que asegura la privacidad de los datos y documentos almacenados en el dispositivo.

Eso sí, los autónomos y microempresas que sean beneficiarias de la ayuda por primera vez y quieran comprar un ordenador, deberán combinarla con otra solución adicional de las incluidas en el catálogo.

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