Las personas vulnerables que no podrán solicitar el cheque de 200 euros para alimentos

El próximo día 31 finaliza el plazo para pedir la ayuda directa de 200 euros aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez para paliar la subida de la inflación y el encarecimiento de la cesta de compra. El Ejecutivo estima que el cheque puede llegar a 4,2 hogares, pese a que los antecedentes no acompañen; en su primera edición, en julio, solo lo cobraron 600.000, el 22% de los 2,7 millones esperados.

El incremento en el posible número de beneficiarios se debe a la subida de los umbrales económicos para poder solicitarla. Frente a los máximos de 14.000 euros para los ingresos anuales y los 43.196,4 euros para el patrimonio descontando la vivienda habitual, ahora la pueden pedir las unidades familiares donde los ingresos totales durante 2022 fueran iguales o inferiores a los 27.000 euros brutos y el patrimonio, también excluyendo la vivienda habitual, alcance los 75.000 euros.

Sin embargo, los requisitos no económicos dejan fuera a un buen número de posibles demandantes de la ayuda ya que, para empezar, los beneficiarios deberán haber sido durante el año pasado asalariados, autónomos o beneficiarias de la prestación o el subsidio por desempleo, requisito que ya excluye a los pensionistas –independientemente del régimen general de la Seguridad Social al que pertenezcan, del tipo de pensión o del importe de ésta– así como a quienes cobran el Ingreso Mínimo Vital (IMV).

Además, por otra parte, también quedan excluidos los administradores de sociedades mercantiles que no hayan cesado su actividad antes de finalizar el año y los titulares de valores de participación en los fondos de una sociedad mercantil no negociados en mercados organizativos. Este requisito afecta también a los cónyuges o parejas de hecho o los ascendientes hasta segundo grado por línea directa que convivan en el mismo domicilio con el solicitante de la ayuda.

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