La semana pasada escuchamos al vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) Luis de Guindos realizar unas declaraciones directas y contundentes sobre la situación del sector financiero. Reconoció que ha habido un proceso de mejora continua y que en general el sector es mucho más resistente ... a situaciones adversas de lo que era en el pasado Hasta aquí su tono positivo.
Publicidad
Pero en su intervención también enfrió el ambiente respecto a las posibles fusiones barajadas en los últimos tiempos. Señaló que el 90% de los bancos supervisados por esta institución cotiza por debajo de su valor en libros. Y que el motivo de esa valoración es que su rentabilidad está por debajo de su coste de capital; o lo que es lo mismo, de su coste de financiacion. En esta tesitura, mal asunto si se tiene que apelar al mercado con demanda de capital a sus accionistas para financiar un potencial movimiento corporativo.
Entonó un ligero mea culpa cuando reconoció que la coyuntura de tipos de interés, cuya fijación es responsabilidad exclusiva del BCE, dificulta la obtención de un mayor rendimiento.Y esgrimió otras razones estructurales como principales motivos de esa falta de rentabilidad. Así, en su opinión el exceso de capacidad del sector, la necesidad de mejorar en eficiencia medida como ratio de costes frente a ingresos y la falta de consolidación -o si prefiere tamaño- como las principales causas. Es decir que su discurso lo podríamos traducir en argot docente en algo así como 'progresa adecuadamente pero se debe esforzar aún mucho más'.
Las tareas propuestas por el vicepresidente deben de servir de acicate al sector bancario para afrontar los vertiginosos cambios a los que se enfrenta. De hecho uno de los más comentados, la irrupción de las Big Tech en la actividad financiera, ya es una realidad. Así, Amazon ha lanzado una cuenta corriente, Google y Apple tienen sistemas de pago que convierten el móvil en una cuenta bancaria, y Facebook va a lanzar una nueva moneda, Libra. Por no hablar de la numerosa cantidad de fintech que también están arañando una cierta cuota de mercado a la banca tradicional.
En definitiva, la recuperación de los bancos pasa por tomar medidas concretas para recuperar margen. Como ejemplo, no se extrañe de que en el futuro le cobren por sus depósitos, otra realidad que también está en el mercado. No obstante la pregunta clave es si las entidades financieras serán capaces de reinventarse y a la vez hacer los deberes propuestos por el Sr. de Guindos de forma rápida y sin descuidos, ya que el tiempo apremia. Yo apuesto por ello.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.