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No es novedad que la calidad del empleo que se está creando tras la crisis deja mucho que desear, pero en su informe sobre 2017 el Consejo de Relaciones Laborales (CRL) aporta nuevos datos relevantes en este sentido. Uno de ellos es el aumento de ... la temporalidad, que no para de crecer. Cerró el año pasado en el 28,5% y en el primer trimestre de este ejercicio se ha disparado al 29,5%. Otro asunto negativo es el incremento de la desigualdad salarial debido a que la crisis ha golpeado con más virulencia a los trabajadores con peores sueldos. Los más bajos acumulan un descenso de más del 5% desde 2008, frente a una subida media del 5,8%.
Son dos de los aspectos que ha destacado hoy el presidente del CRL, Tomás Arrieta, en la presentación del informe sobre la Situación Económica y las Relaciones Laborales en 2017. En relación a la calidad del empleo, ha llamado la atención sobre la paradoja que supone que estén creciendo a un ritmo mucho mayor los contratos indefinidos frente a los temporales (12% frente al 3%), pero que la tasa total de temporalidad no pare de crecer. Es un fenómeno que van a investigar, aunque ha adelantado unas posibles explicaciones: «Por un lado, que la mayoría de jubilados que salen del mercado tenían un contrato fijo. Por otro, que la estabilidad del empleo indefinido que se crea es menor».
En cuanto a la desigualdad salarial, toma de referencia la evolución recogida en la EPA entre 2008 y 2016. De acuerdo con esta encuesta, el 10% de los trabajadores con peores salarios sufrió un descenso del 5,3% en la remuneración y el siguiente 10% con sueldos más bajos, un recorte del 3,2%. En contraste, los salarios más altos han crecido durante la crisis. «Es una evidencia de que las retribuciones más bajas han sufrido más con la recesión. Es posible que influya la mayor incidencia de la contratación a tiempo parcial en estos tramos», ha explicado Arrieta.
Por otro lado, el CRL ha resaltado que, a pesar de la recuperación del PIB hasta superar niveles pre-crisis, todavía faltan 50.000 empleos a tiempo completo. «Eso significa que se ha incrementado la productividad, pero también que la bonanza económica genera en la actualidad menos empleo», ha comentado el presidente del organismo.
Entre los aspectos más positivos ha citado la reactivación de la negociación colectiva durante la primera parte de este año. Supone una gran esperanza tras años de bloqueo. «Esperemos que no sea un espejismo y que se abra una nueva etapa en este sentido», ha dicho.
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