Siemens Gamesa cambia de consejero delegado, el tercero en siete años

Su puesto lo ocupará ahora Vinod Philip, otro 'hombre de la casa', que hasta ahora ocupaba una dirección global de la compañía y que tiene una dilatada experiencia en el área técnica, el punto débil de la empresa. El relevo se producirá de forma efectiva en el mes de agosto. En el último ejercicio cerrado Siemens Gamesa perdió 4.338 millones de euros y en el primer semestre del actual las cosas siguen mal. Las pérdidas del último semestre se elevan ya a 800 millones de euros y el grupo anticipa que mantiene sus previsiones de cerrar el ejercicio con 2.000 millones de euros en números rojos. La única noticia positiva de la jornada es que Siemens Gamesa ha anunciado que continuará en el negocio de la generación eólica terrestre, ya que durante meses se ha rumoreado con la posibilidad de que abandone este segmento de negocio -es el que se desarrolla en España- debido a las pérdidas millonarias en las que ha incurrido.

Eickholt, curtido en el seno de la multinacional Siemens y especializado en enderezar negocios complicados, fue situado al mando de Gamesa en febrero de 2022 en una especie de operación desesperada. Las pérdidas se acumulaban en la empresa por los retrasos en la construcción de algunos parques eólicos en el norte de Europa y el margen de negocio se había ido por un sumidero, fruto de un alza de precios de las materias primas que no se podía compensar. Los aerogeneradores se comprometen con los clientes con una antelación de hasta tres años y Siemens Gamesa tenía todos sus contratos firmados sin revisiones de precios.

Siemens Gamesa tiene paralizada la fabricación de aerogeneradores terrestres desde el pasado verano, después de ponerse en evidencia serios problemas técnicos en sus plataformas 4.X y 5.X, de las que ya habían instalado más de 200 unidades por el mundo. Problemas de diseño de varios componentes provocaban fuertes vibraciones e incluso la autodestrucción de los aerogeneradores en las operaciones de frenado del eje del rotor. Los fallos en las unidades instaladas han provocado una riada de indemnizaciones, que también han aumentado al no poder cumplir los plazos de entrega con los clientes. Por el momento la compañía no ha admitido ser capaz de resolver los problemas técnicos y mantiene bloqueadas las ventas.

La empresa ha anunciado hoy que avanza en un ambicioso proceso de reestructuración que incluirá excedentes de plantilla, pero no lo ha cuantificado por el momento. Sí que ha reiterado su deseo ya anticipado hace meses de concentrar sus actividades en Europa y Estados Unidos, y también que se compromete a intentar absorber dentro de la propia empresa -y especialmente en el área de generación marina, donde espera crecimientos- a la plantilla que considere excedentaria.