El sector del metal retrasa la recuperación a 2023 tras el frenazo del segundo semestre

El frenazo en el segundo semestre se refleja en el hecho de que un 31,7% de las empresas encuestadas registró una actividad inferior a la prevista, 10 puntos más que en la primavera, mientras que el 44% se situó en línea con lo esperado. «Circunstancias como la falta de materias primas, el aumento del coste de la energía o los problemas de logística han impactado directamente en el sector generando una situación de incertidumbre que aleja la recuperación hasta 2023», ha señalado Yagüe.

La automoción, uno de los sectores con más peso en el ámbito del metal, se ha visto especialmente golpeada debido a la escasez de semiconductores, ya que en su caso un 53% de las empresas han registrado una actividad por debajo de la prevista.

Para 2022 las empresas esperan «cierta recuperación, sin llegar a la normalidad» y prevén un nivel medio de actividad del 77,5%. No obstante, aumenta hasta el 18,6% las que tienen perspectivas por debajo del 50%. En este sentido, el 52% confía en una mejoría de sus mercados para este semestre y caen al 12,5% las que lo ven en recesión. También se observan diferencias por sectores y cabría destacar que la automoción parece albergar esperanzas de remontar tras una segunda mitad de 2021 muy negativa, con el mercado en claro retroceso.

La facturación ha aumentado de media un 4% respecto a 2020 ( no así la automoción), pero solo un 39% de empresas ha registrado un incremento respecto a 2019. En cuanto a los resultados, una de cada tres compañías ha sufrido pérdidas en 2021, empeorando este dato en 10 puntos respecto a 2020.

Sobre los factores que más han impactado en las empresas figuran el encarecimiento de las materias primas (72,5%) y de la electricidad, que ha llevado a parar a plantas como Sidenor, cuyo máximo responsable, José Antonio Jainaga, también presidente de la asociación de grandes consumidores de energía (AEGE), se enfrentó con Iberdrola por la falta de ofertas con precios razonables para contratos a largo plazo. Yagüe no ha querido entrar en este espinoso debate salvo para manifestar su confianza en que se alcancen acuerdos en los próximos meses, pese a la dificultad que hay. «El mercado está muy volátil y las eléctricas quieren pasar el precio 'spot0 a los contratos a largo plazo».

De cara a este año ha saltado otro motivo de preocupación: la escalada del IPC y la reivindicación de los trabajadores de trasladarlo a los salarios. Este año además ha caducado el convenio del metal en Bizkaia y hay que negociarlo. La presidenta de FVEM ha dicho que «las empresas advierten de la dificultad de repercutir la inflación a los sueldos en la actual coyuntura».

Por otro lado, ha destacado «la recuperación del empleo por delante de la actividad». Así, ha destacado la previsión de crear 1.000 puestos de trabajo, aunque también ha alertado de que un 70% de las empresas tiene dificultades para encontrar los perfiles que necesita.