Kutxabank reserva 145 millones para afrontar los gastos hipotecarios que reclamen sus clientes

Tras la intervención del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en enero, el Supremo aclaró en una última sentencia del 14 de junio que la prescripción para que los clientes reclamen el abono de estos gastos depende exclusivamente de cuando tengan conocimiento efectivo de este derecho, sin atender a la fecha de la firma de su crédito o de su ejecución. Un hecho que, según reconoce Kutxabank, implica «de facto la imprescriptibilidad».

Así las cosas, la entidad ha decidido aprovechar sus ganancias récord -263 millones en el primer semestre- para provisionar el dinero con el que hacer frente a estos pagos, según consta en la información financiera enviada respecto al primer semestre del año a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En total, ha decidido detraer de sus margen de ganancias un total de 145,5 millones a este efecto.

Fuentes del banco confirmaron ayer a EL CORREO que se trata de una dotación «que responde a un ejercicio de prudencia ante la nueva situación creada», y señalan que no es una decisión que hayan adoptado otras entidades. Así, el BBVA no menciona esta situación en la nota sobre sus provisiones en su último informe financiero, mientras que el Santander indica que todavía hay dudas legales en la interpretación.

El caso es que estos 145,5 millones se han notado ya en los resultados de Kutxabank del primer semestre de este año. El beneficio neto obtenido de 263 millones solo ha supuesto un crecimiento respecto al pasado año del 5,4%. Una cifra escasa comparada con las ganancias logradas por la gran banca española, que empujada por los tipos de interés permitió al Sabadell aumentar su beneficio un 40,3% o un 37% al Santander, mientras que el del BBVA creció un 29% y el de CaixaBank, un 25,2%. Y es que si Kutxabank no hubiera realizado esas provisiones para los gastos hipotecarios, sus ganancias hasta junio hubieran rondado los 370 millones de euros, casi un 50% más que en el mismo periodo del año pasado.

El dinero destinado a provisiones por el banco vasco hasta el 30 de junio suma un total de 318 millones de euros, más del doble que el año pasado. Es el movimiento más importante en este apartado desde que la entidad inició su andadura en 2012 con la integración de las antiguas cajas de ahorro BBK, Vital y Kutxa.

En el balance, es el apartado de 'restantes provisiones' en el que se recoge el saldo específico destinado a hacer frente a este tipo de riesgos. La cuantía se ha mantenido en la última década en torno a los 120 millones. Ascendió a 186 el año pasado y con esta última aportación se ha disparado hasta los 332 millones.

El banco vasco sigue presentando el mejor ratio de mora en España con un 1,31%. La mitad de los gastos hipotecarios por un préstamo medio de 150.000 euros ascienden a alrededor de 900 euros.