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La recaudación de impuestos en Bizkaia, Gipuzkoa y Álava ha vivido una auténtica explosión al cierre de los cinco primeros meses del año, como consecuencia de un doble efecto positivo que ha coincidido en el tiempo. Con todo, los ingresos de las haciendas forales han ... superado en 1.298 millones de euros a la cifra ingresada hasta mayo de 2020. Incluso, la recaudación fiscal de este periodo ha superado en 128 millones de euros los ingresos contabilizados en los cinco primeros meses de 2019, cuando la economía aún crecía aunque a ritmo moderado y no había indicios de pandemia o de crisis.
El primero de los dos efectos que han generado esta situación es el trasvase extraordinario de la Agencia Tributaria a la Diputación de Bizkaia, por un importe superior a los 400 millones de euros. Una cantidad que está ligada a un viejo litigio en torno a la liquidación del IVA generado en el suministro de carburantes desde el puerto de Bilbao, cuando éstos son comercializados fuera de Euskadi. El Tribunal Supremo reconoció el derecho de Bizkaia a este ingreso que se acaba de regularizar ahora.
Por otra parte, las diputaciones están recuperando ahora los aplazamientos de pago concedidos el pasado año a autónomos y pymes tras la declaración de la pandemia. Estos aplazamientos afectaron fundamentalmente a los ingresos trimestrales por IVA así como a las retenciones de IRPF en las nóminas y los pagos fraccionados de los autónomos. Desde las diputaciones se ha mostrado la satisfacción por la buena marcha de los ingresos, que confirman el proceso de recuperación de la actividad económica tras la dura crisis generada por el Covid.
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