El Gobierno vasco quiere potenciar 'los pueblos inteligentes' para relanzar su economía

La consejera de Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha puesto en valor cómo el desarrollo actual de las infraestructuras TIC en el medio rural vasco -que fue premiado por la propia Comisión Europea en 2019- ha permitido que durante la pandemia mucha gente pudiera teletrabajar desde zonas rurales, ya que el 97% de la población vasca tiene cobertura de banca ancha ultrarrápida. Así Tapia ha constado que se ha producido «un incremento llamativo en algunos núcleos de escasa población en Álava donde todavía resulta prematuro medir si se trata de un incremento coyuntural o que vaya a perdurar en el tiempo».

En líneas generales en Euskadi el 8,3% de la población vive en localidades con una densidad de menos de 150 habitantes por kilómetro cuadrado, redondeando unas 177.000 personas, que en los últimos veinte años no ha experimentado grandes oscilaciones, en parte según explicó Tapia, debido a las medidas del Programa de Desarrollo Rural vasco, manteniéndose la población en general o incluso en algunas comarcas habría crecido.

Así indicó que la búsqueda de una mejor calidad de vida ha provocado que en la comarca de Montaña Alavesa en 2020 y 2021 la población haya crecido un 7,1%; el incremento en la comarca de Valles Alaveses también haya experimentado un crecimiento de población del 2,47% durante 2020 y 2021, con 228 personas empadronadas más; y que en la comarca de Estribaciones del Gorbea se haya producido una evolución positiva del 2,80%, con 274 nuevas personas empadronadas.

Con la futura Ley de Desarrollo Rural del País Vasco -que ahora deberá pasar al trámite parlamentario para su debate, enmiendas y aprobación- persigue el desarrollo sostenible de las zonas rurales para que «sean lugares atractivos donde vivir y emprender, desde una perspectiva de cohesión e igualdad de oportunidades», explicó Tapia. La ley pretende fomentar que las zonas rurales se unan al tren de la innovación, las TICs, la modernidad, el emprendimiento y la sostenibilidad, y con ello se logre una nueva visión más integrada de país. Todo ello sin obviar el papel estratégico que la actividad agraria juega en la gestión territorial y medioambiental de Euskadi, además de su papel económico y proveedor de alimentos.

Entre las medidas practicas para avanzar hacia esos objetivos, la consejera especificó que la nueva ley cuenta con un enfoque 'rural proofing' -una especie de lente rural- lo que significa que cada política que se diseñe desde el Ejecutivo «tenga en cuenta su afección en el espacio rural vasco», algo similar a la aplicación de la perspectiva de género en todas las políticas.

Para avanzar en esta gran visión, el Gobierno prevé en el texto legal la creación de una nueva 'Red vasca de Desarrollo Rural', un nuevo órgano compuesto por representantes institucionales y equipos técnicos del Gobierno Vasco, Diputaciones Forales, EUDEL, ACOA-AKE (Asociación de Concejos de Álava), Cuadrillas, Hazi (Lurralde), Asociación de Desarrollo Rural, Grupo de Acción Local y en general, otro tipo de organizaciones territoriales y sectoriales de referencia y agentes implicados en el despliegue de los Programas Comarcales de Desarrollo Rural.