El Gobierno de Sánchez empuja para que Indra se incorpore a la operación

Fracasada la idea de que sea Sener quien asuma ese papel, el Ministerio de Industria no ha perdido la esperanza de que sea Indra la protagonista. La estrategia tiene mucho que ver con reforzar la industria de Defensa en España, además de colocar como accionista de referencia de ITP a un socio 'de confianza'.

El Gobierno posee el 18,7% de las acciones de Indra -sociedad que cotiza en Bolsa-, pero su capacidad de influencia va más allá, ya que también es uno de sus principales clientes. En especial en el área de Defensa que, paradojas de la vida, dirige el exdirector general de ITP Ignacio Mataix.

No son pocas las fuentes que aseguran que el cese el pasado mes de marzo del presidente de Indra, Fernando Abril-Martorell, fue forzado por el Ejecutivo precisamente porque no se empleó a fondo en el asalto a ITP. El nuevo presidente, Marc Murtra, un hombre de la órbita del PSC, ha recibido el encargo de reconducir la situación. Y necesita tiempo para convencer a su consejo de administración, ya que algunos de sus miembros consideran que entrar en ITP es una buena apuesta estratégica, con la misma convicción que defienden que no vale 1.700 millones de euros. Bain concedió ayer esa prórroga para que Murtra intente convencer a su consejo de que merece la pena arriesgar en la empresa vasca.