Rementeria apuesta por «repescar» a los contribuyentes que se han fugado a Madrid

El diputado general de Bizkaia advirtió que en su opinión el reto no es «tocar un impuesto concreto, ya que lo lógico es revisarlos todos y adaptarlos a las nuevas necesidades de nuestra sociedad». En unas declaraciones a Radio Euskadi, no eludió la polémica suscitada hace algunos días por el diputado de Hacienda de Bizkaia, José María Iruarrizaga, quien reconoció en una comparecencia en las Juntas Generales que la fiscalidad del territorio provoca la huida de algunos contribuyentes, se supone que los de rentas elevadas, ya que son éstos los que encuentran razones económicas para hacerlo. Iruarrizaga se refirió en concreto al Impuesto de Sucesiones y a la necesidad de «analizar lo que sucede en las comunidades autónomas de nuestro entorno». Madrid tiene una exención prácticamente total en ese impuesto, que ahora ha sido imitada también por Andalucía y por Castilla y León.

Pero Sucesiones tan sólo es la punta del iceberg. El diputado general vizcaíno admitió ayer que ha habido fuga de contribuyentes, al menos «tiempo atrás» -aseguró desconocer si ese fenómeno persiste- y principalmente a Madrid, comunidad que ofrece un IRPF más moderado a las rentas altas, un Impuesto de Sucesiones con una exención elevada y que no exige el pago del Impuesto de Patrimonio. Así, para los contribuyentes de mayores ingresos, su factura fiscal anual en Euskadi puede acceder al 65% de sus rentas. En Madrid esa tasa jamás supera el 45%, lo que supone nada menos que veinte puntos de diferencia sobre sus ingresos anuales.

«Hay que tener en cuenta -añadió Rementeria- que los contribuyentes que tienen rentas elevadas tienen una gran facilidad para deslocalizarse. En muchos casos ya cuentan con una vivienda aquí y otra en Madrid, por lo que su cambio de domicilio fiscal es muy sencillo», explicó. A continuación reconoció que su preocupación no es «perder lo que pagan por el Impuesto de Patrimonio, sino lo que abonan por el IRPF. Suelen ser contribuyentes de rentas muy elevadas, que pagan mucho en el IRPF».

En este contexto, se mostró favorable a que la reflexión que se aborde el próximo año tenga en cuenta la necesidad de «repescar» a quienes han dejado de ser contribuyentes vascos. Una manifestación que está en línea con la realizada por el diputado general de Álava, Ramiro González, quien se mostró partidario de abrir un debate sobre el tema pero dando a entender que es partidario de la eliminación del Impuesto de Patrimonio. Al igual que el regidor alavés, Rementeria señaló que «la fiscalidad es un conjunto», oponiéndose así a que se aborde la reforma de una figura tributaria concreta sino «de todos los impuestos». El objetivo, concluyó, «debe ser mantener y mejorar nuestra calidad de vida», tras aclarar que los «impuestos deben adaptarse a los nuevos retos de la sociedad. Tenemos que dar una respuesta al reto demográfico, por ejemplo, y la fiscalidad también debe utilizarse para ello». Ramiro González ya expuso la pasada semana que ante una eventual retirada del Impuesto de Patrimonio y una rebaja en Sucesiones «sería necesario tocar otros impuestos para no perder recaudación». No reducir los ingresos sería, en opinión del regidor alavés, la auténtica línea roja de la próxima reforma fiscal en el País Vasco.