El arraigo que favorece la competitividad

El apoyo histórico que Kutxabank ha prestado al sector industrial vasco se fundamenta en una visión a largo plazo, la cual busca apuntalar proyectos empresariales, impulsar la actividad de las empresas que se encuentran en procesos de crecimiento o la de aquellas que pretenden dar un salto cualitativo en su desempeño.

En eso consiste el arraigo, en colaborar con las empresas y las entidades públicas del entorno para espolear la economía de un país, de forma que se genere una circularidad basada en la creación de valor económico y social, la creación de resultados, el fomento del empleo y la generación de actividad económica. Todo ello redunda de forma directa en la activación del flujo financiero, ámbito en el que actuamos desde nuestra posición de principal banco vasco.

Por una clara coincidencia en su misión y visión, en Kutxabank somos un instrumento al servicio del tejido empresarial, al que tratamos de aportar competitividad y estabilidad, a través de una relación sustentada en la confianza mutua.

Esta confianza nos permite estar en el corazón del flujo financiero de nuestra industria, pero en esta nueva etapa estratégica, también queremos ser el primer banco con el que cuente a la hora de abordar planes más ambiciosos, como nuevos proyectos de inversión, o planes de crecimiento orgánico o inorgánico.

De ahí que una de las principales apuestas estratégicas de Kutxabank consista en la actualidad en crecer en la financiación a empresas, cuidando la calidad del riesgo y mejorando nuestros procesos.

Desde la robustez que nos aporta nuestra base digital, contamos con una amplia gama de soluciones, que van desde el porfolio de soluciones financieras tradicionales, hasta recursos más sofisticados e innovadores, con palancas que nos permiten llegar a herramientas más complejas que hasta ahora quedaban lejos de nuestra órbita.

Así, con el objetivo de responder a las necesidades de la industria en el largo plazo, sobre todo en materia de financiación y crecimiento, Norbolsa, la sociedad de valores del Grupo Kutxabank ha acompañado a multitud de empresas en el acceso al mercado a través de diversos tipos de emisiones o salidas a Bolsa.

Además, desde hace unos meses, Kutxabank mantiene una colaboración estratégica con Alantra, sociedad especializada en banca de inversión y operaciones de financiación alternativa. Esta alianza nació con la vocación de actuar sobre todo en operaciones ligadas al ámbito de las empresas industriales vascas y en especial en aquellas de gran dimensión que hasta ahora se desviaban a bancos de inversión ajenos a Euskadi.

Quiero destacar, asimismo, la colaboración estratégica que mantenemos con Elkargi desde sus inicios, ya que somos dos entidades que compartimos visión y compromiso con la industria vasca.

La sociedad de garantía recíproca ha sido una de las grandes protagonistas en situaciones históricas muy concretas, como recientemente la crisis provocada por el Covid. Las operaciones de financiación pública que ha avalado han sido fundamentales para dotar de liquidez a las empresas vascas. Por eso fuimos la primera entidad en colaborar con las líneas de financiación que activó en el marco de la crisis.

Otro ejemplo de nuestra colaboración con Elkargi es Bidegiñ, un fondo de inversión que pretende captar 200 millones de euros para invertir en pymes de nuestro entorno.

No podemos olvidar la importante cartera de participaciones industriales que mantenemos en Euskadi, la más relevante del territorio, con un valor que en la actualidad alcanza los 1.800 millones de euros.

Desde la posición de un banco capaz de aportar soluciones innovadoras a las necesidades globales de nuestro sector productivo, estamos implementando todas las medidas necesarias para estar más cerca de las expectativas de las empresas, también cuando requieren asesoramiento en la compraventa de compañías, en salidas a bolsa, la emisión de bonos o en operaciones de crecimiento.

No cabe duda de que el bienestar de la comunidad vasca está estrechamente relacionado con la fortaleza de su base industrial. Por eso, el mayor valor de Kutxabank sigue siendo el compromiso y el arraigo que mantiene con el territorio y su desarrollo económico.