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Febrero ratificó lo que todos los organismos económicos vienen señalando sobre la economía de la zona euro: se enfría el consumo, la producción y los pedidos. Europa acusa las subidas de precios y de tipos interés y se desacelera, especialmente la industria. El impacto en ... la economía vasca, apoyada principalmente en las ventas industriales al exterior, así lo ha trasladado a los datos hechos públicos este viernes por el Instituto Vasco de Estadística (Eustat).
Y es que las exportaciones volvieron a caer en febrero a doble dígito, un 10,2% que se acumula con el retroceso del 12,7% del primer mes del año. En febrero, las ventas ascendieron a 2.694 millones, 300 menos que los 2.923 del mismo mes del año pasado. Además del enfriamiento económico, el contraste se hace más fuerte porque el primer trimestre de 2023 fue especialmente bueno.
Además, las importaciones siguen sin recuperarse y en febrero volvieron a retroceder. Un 3% que hace un acumulado anual del 4% y que es síntoma de que las empresas vascas han frenado las compras internacionales y la adquisición de materias primas ante unas carteras de pedidos que no crecen.
El impacto de Mercedes y Petronor sigue siendo clave ya que ambas compañías aglutinan el 20% de las ventas exteriores de la economía vasca. En el caso de las furgonetas de la multinacional alemana, el retroceso es de un 24,2% con 202 millones. Y en cuanto a los combustibles elaborados en la refinería vasca de Repsol, el descenso de las ventas ha sido del 16,1% con 137 millones de euros.
Estos datos han impactado especialmente en Álava que, por territorios, es el que peor comportamiento ha presentado en Euskadi. Las exportaciones alavesas retrocedieron un 17,1% con 785 millones, frente al ajuste del 10,4% de Bizkaia con 1.001 millones y el pequeño recorte del 2,4% en Gipuzkoa con 835 millones.
Si bien la fabricación de vehículos que acusa la caída de la demanda en Europa se ha dejado notar, los fabricantes de componentes de automoción, en cambio, se han beneficiado del vigor del sector en otros mercados como Asia o América. Así, las ventas de este capítulo arancelario crecieron un 20,3% con 209 millones.
Más síntomas del nuevo escenario de la UE es que Alemania, tradicionalmente el primer comprador de la economía vasca, sigue relegado a la segunda posición por cuarto mes consecutivo y por detrás de Francia. La contracción del 0,3% de la economía germana en 2023 sigue notándose también en la balanza exterior vasca.
La mitad de las exportaciones, eso sí, siguen concentradas en Francia, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos e Italia con 1.361 millones en total. A los Estados Unidos se han exportado bienes por valor de 190 millones y sus compras se han centrado en el refino, con 25 millones.
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