Las exportaciones vascas crecen un 15%, pero la compra de energía se desploma

Esta caída en la demanda de energía es interpretada por los analistas como una señal de alerta ya que evidenciaría unas planificaciones en las que la actividad decae y, por lo tanto, el combustible industrial requerido será menor. Así pues, el tejido económico sigue en un escenario de incertidumbre muy expuesto a la evolución de la guerra de Ucrania, los precios o los tipos de interés.

De momento, la fabricación para el exterior sigue funcionando y los grandes clientes de Euskadi (Francia, Alemania, Estados Unidos, Reino Unido e Italia) siguen demostrando fuerza manteniendo los pedidos. Este crecimiento no se puede residenciar en un efecto exclusivo de la subida de precios, ya que el número de toneladas enviadas al exterior no se reduce y creció en febrero un 9%.

La fuerza exportadora sigue residiendo en el combustible y la automoción. Así, Petronor sigue aumentando ventas y se convierte en el principal protagonista del crecimiento del 42% en las exportaciones de refinados del petróleo (163 millones). El veto al diésel ruso, además, convierte en estratégica esta instalación del Puerto de Bilbao.

El mayor crecimiento se da en la automoción. El peso de Mercedes con su planta alavesa es clave y las ventas al exterior, principalmente a Alemania, de las furgonetas contribuyen a elevar esta partida en un 67% (267 millones) en el caso de los vehículos de transporte de personas y del 43,8% para mercancías (229 millones).

La fabricación de tubos para gas y petróleo recuperada por la crisis energética sigue llenando la cartera de pedidos de Tubacex y Tubos Reunidos que se deja sentir en su sección arancelaria con un incremento en las exportaciones del 58% en febrero (68,5 millones de euros).

Las importaciones, además de las de energégicas, muestran también un estacamiento. En febrero presentaron una evolución casi plana respecto al año anterior con un incremento tan solo del 0,9% (2.182 millones). Es, además, el primer mes en el que se acusa este fenómeno después de un largo periodo de crecimiento de este importe, entre otras cosas, por la subida de costes.

Además del petróleo y el gas, el hierro y el acero son otro de los capítulos que mayor recorte ha registrado en las importaciones respecto al pasado año. La caída en esta partida arancelaria fue del 20%, con un descenso de 48,5 millones.

Álava protagonizó el papel exportador con un crecimiento en febrero del 28,4% por un 8% en Bizkaia y un 13,2% en Gipuzkoa.

En Álava, las exportaciones se concentraronen el «material de transporte» gracias a Mercedes (57,9% del total), con un incremento del 42,0% para un total de 549,8 millones exportados, en los «metales y sus manufacturas» (13,4% de incremento interanual) y en los «plásticos y caucho» (34,9% de ascenso).

En Gipuzkoa, crecieron las ventas del «material, máquinas y aparatos eléctricos» (19,2%), al igual que las del «material de transporte» (12,6%); también se da un fuerte incremento de los «productos del reino vegetal», sección arancelaria que desde abril del año 2022 sitúa, cada mes, sus exportaciones por encima de los 13 millones de euros, alcanzando en febrero del presente año los 27,1 millones.

En el caso de Bizkaia, el efecto Petronor provocó un aumento de las exportaciones de «productos minerales y energéticos» (43,2%), de los «productos químicos» (32,3%) y de las «grasas y aceites» (29,9%).