Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Pese a la contundencia, estaba dentro del guión de lo previsible, porque los fondos de inversión, cuando toman el mando de una empresa, no atienden a cuestiones emocionales. Tan solo a números y a una proyección de futuro a corto y medio plazo. Este jueves, ... el nuevo consejero delegado de Euskaltel, José Miguel García, anunció al comité de empresa el despido inmediato de 25 trabajadores de la compañía. Los afectados fueron informados de forma individual unos minutos más tarde. El nuevo ajuste, el segundo en apenas un mes, se suma a la destitución de una veintena de directivos de la operadora vasca, formalizado a mediados del pasado mes de junio. Y todo apunta a que esto no es sino el principio de la singladura.
El comité de empresa convocó este jueves una concentración de trabajadores a las puertas del cuartel general, en el Parque Tecnológico de Bizkaia. Los sindicatos temen nuevos despidos en los próximos meses, aunque fuentes de la empresa aseguraron que «por el momento no están previstos nuevos cambios en la estructura».
De esos 25 despidos anunciados este jueves, 10 de ellos pertenecen a la plantilla de la filial gallega R, 8 a Euskaltel y los 7 restantes a la operadora asturiana Telecable. Según indicaron fuentes sindicales, en esta ocasión no han sido directivos los afectados, sino empleados de rangos intermedios e incluso algunos con funciones puramente administrativas. «No entendemos las razones -señaló a EL CORREO un dirigente sindical-, porque eran personas que tenían una considerable carga de trabajo».
El consejero delegado ha enmarcado este nuevo ajuste laboral en el proceso de simplificación de la estructura, para unificar los servicios y las áreas de trabajo tanto de Euskaltel como de la filial gallega R y de la asturiana Telecable. Fue también la justificación con la que asumió el despido de la veintena de directivos. El grupo tiene en la actualidad 705 empleados en su plantilla, aunque se estima que genera algo más de 4.000 empleos con la subcontratación y la red comercial.
El anuncio se produjo apenas veinticuatro horas después de que la junta de accionistas de la compañía oficializase el aumento de poder del fondo de inversión británico Zegona, que contará a partir de ahora con cuatro representantes en el consejo de administración. La ratificación del propio José Miguel García como consejero delegado tuvo un respaldo extraordinariamente elevado, ya que fue apoyado por el 86% del capital social de la compañía.
Su nombramiento se produjo después de un pacto alcanzado por Zegona, Kutxabank y la Corporación Alba, que son los tres socios de referencia de la operadora. El consejo de administración, en el que se sientan representantes de los tres accionistas de referencia y también otros vocales que, al menos formalmente, figuran como «independientes», también ha respaldado de forma unánime el nombramiento de García como primer ejecutivo.
El sindicato ELA emitió este jueves un comunicado en el que critica la decisión de Euskaltel de poner en marcha un proceso de despidos, al tiempo que también señala de forma directa a la consejera del Gobierno Arantxa Tapia por el apoyo que ha brindado al fondo británico Zegona. «Resulta evidente que las condiciones laborales, el empleo y cualquier otra cuestión social son un obstáculo para la maximización del dividendo accionarial, objetivo último y único de este fondo de inversión británico», apuntó el sindicato nacionalista. En ese contexto, el comunicado de ELA lanzaba la pregunta de si los nuevos despidos son «una buena noticia para la consejera Arantxa Tapia y su enfermiza costumbre de agradecer a las diversas corporaciones empresariales cualquier actuación, aunque esta sea contraria al interés de la ciudadanía vasca a la que representa desde su cargo público», concluía.
Además del respaldo del resto de accionistas, Zegona también ha obtenido el aval del Gobierno vasco -no hay que olvidar que fue el fundador de la empresa- para poner en marcha un nuevo plan estratégico, cuyos detalles últimos no se conocerán hasta finales de año. Incluso, la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia, reiteró este respaldo recientemente cuando, a raíz del despido masivo de directivos, aseguró que «las empresas se gestionan tomando decisiones». Una frase que se interpretó también como un apoyo al despido de los directivos de la compañía, algunos de los cuales llevaban más de 20 años en su plantilla. El nuevo recorte, sin embargo, sitúa en una situación incómoda a la consejera, ya que también había asegurado a principios de junio que «Zegona se ha comprometido a no entrar a cuchillo, y han cumplido».
El nuevo consejero delegado de la compañía presentará en los próximos días los resultados económicos del primer semestre. También prepara de cara a la recta final del año el nuevo plan estratégico de la firma, en el que deben definirse algunas cuestiones clave, como es la nueva apuesta de expansión territorial y también la elección de la marca para ese proceso.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.