Euskadi prevé invertir 150 millones en cuatro empresas estratégicas en 2025

Esa herramienta cuenta con unos recursos disponibles de 200 millones de euros y se convierte en una palanca estratégica para frenar el alejamiento de centros de decisión empresarial de Euskadi. El propio lehendakari Imanol Pradales ha fijado el objetivo para esta legislatura de crear un 'fondo soberano' que pueda alcanzar los 3.000 millones. Sumando a los recursos de Finkatuz los que tienen las fundaciones bancarias de Kutxabank, las EPSV vascas o algunos 'family office'.

Además, el anuncio llega cuando el presidente de Sidenor, José Antonio Jainaga, analiza la formulación de una oferta por comprar el 29,9% de las acciones de Talgo. Una operación para hacerse con el control del fabricante de trenes que cuenta con el respaldo del Gobierno vasco y también del Ejecutivo central. La operación se centra en las acciones del fondo de inversión Trilantic, que garantizan el control de la compañía.

Finkatuz, hasta ahora, solo se ha empleado para invertir 65 millones en ITP Aero y elevar hasta el 3% la participación del Gobierno en la otra ferroviaria vasca, CAF. Además, tiene ya desde su constitución el 7% de Kaiku. Pero desde la operación de la aeronáutica ITP no ha vuelto a realizar ninguna inversión en más de dos años.

La comparecencia de Nöel d'Anjou en el Parlamento este lunes abre la ronda de explicaciones que los diferentes responsables vascos harán esta semana sobre sus partidas de gasto. Las Cuentas de 15.728 millones de euros son el mayor techo de gasto público en Euskadi. Una apuesta «valiente», según ha señalado d'Anjou para hacer frente a un escenario económico en el que «preocupa la situación de Alemania con una debilidad crónica desde 2022» y que ha provocado «signos claros de debilidad en la industria manufacturera» en una Euskadi que se ha venido refugiando en el «vigor de los servicios». El responsable de las finanzas vascas ha señalado que «no se anticipan cambios apreciables en el futuro» y por eso ha defendido su proyecto de Presupuestos para garantizar la calidad de las políticas públicas y las inversiones necesarias.

Para sacarlos adelante, aunque cuenta con la mayoría necesaria de los partidos que conforman el Gobierno vasco, PNV y PSE, d'Anjou ha ofrecido diálogo a los grupos de Bildu, PP y Sumar. Con ellos comenzará una ronda de contactos el día 11 de noviembre y d'Anjou ha pedido «altura de miras y propuestas viables y realistas».

La oposición ha cuestionado las previsiones económicas del Gobierno y que sujetan los ingresos del Presupuesto. Unas cifras construidas sobre un diagnóstico en el que el PIB vasco avanzará en 2025 un 2,1%, se crearán 15.000 empleos y la tasa de paro se reducirá al 7%. El portavoz de Bildu, Pello Otxandiano, ha criticado cierto optimismo en el Ejecutivo y ha señalado que al incertidumbre de la crisis industrial y el parón de Europa no apuntan en la misma dirección en la que plantea el Gobierno. Por ello ha solicitado analizar a fondo los impuestos y establecer un sistema fiscal que genere unos ingresos que soporten servicios públicos como la educación y la inversión que la industria necesita.

El portavoz económico del PP, Álvaro Gotxi, ha citado la memoria económico financiera del propio proyecto de Cuentas, que habla de un escenario de «debilidad industrial» para asegurar que las previsiones económicas de un crecimiento del 2,1% «no se van a cumplir». Ha denunciado también un aumento de endeudamiento y un recurso al 0,3% de déficit sin que se haya acordado todavía en la Comisión Mixta de Concierto. Aun así, se ha mostrado dispuesto a hablar, aunque ha resaltado que tiene «pocas esperanzas» sobre la disposición real del Gobierno para pactar cambios en las Cuentas.

El portavoz de Sumar, Jon Hernández, ha rechazado la línea general del Presupuesto y ha reclamado mayor compromiso con los servicios públicos restando inyecciones a privatizaciones en Sanidad y Educación. De cara a los acuerdos y contactos entre partidos, Hernández, ha pedido al Gobierno que aclare si se inclina a trabajar en un pacto en clave de izquierda o con un enfoque liberal, más cercano al PP.