A estas alturas del año llueve más en lo climátológico, pero un poco menos para el bolsillo de los consumidores de energía, que ven cómo los mercados les conceden un cierto respiro. En lo que va de 2018 los usuarios de electricidad han pagado en ... su factura eléctrica un 6% menos que en el mismo periodo del año pasado, mientras que los clientes de gas natural encaran el segundo trimestre del ejercicio con un descenso en la tarifa regulada de aproximadamente el 4%. Lo que resulta un alivio en un contexto generalizado de subida de precios en la cesta de la compra.
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En ambos casos, tanto para la luz como en lo que se refiere al gas, este abaratamiento es una consecuencia del comportamiento de los mercados. El de la electricidad sirve para fijar una buena parte del término de energía para los usuarios del Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC). Es decir, la tarifa regulada. Y en este primer trimestre, el mercado mayorista (también conocido como 'pool') ha marcado una media de 48,34 euros el mevatio/hora (Mw/h).
Son ocho euros menos que en el mismo periodo de 2017, cuando el mercado promedió 55,47 euros. Un nivel bastante elevado que se alcanzó fundamentalmente por el anormal comportamiento del pool en enero del pasado año, cuando se disparó a 71,49 euros Mw/h. Este año, en el mismo mes se rozaron los 50 euros. En cuanto a febrero y marzo, con 54,88 y 40,18 euros Mw/h respectivamente, no ha habido tantas diferencias en comparación con el año anterior pasado (51,74 euros y 43,19 euros).
La mayor participación de las energías renovables en el mix eléctrico ha sido la razón principal del abaratamiento del mercado mayorista. En lo que va de año la energía eólica ha sido la principal fuente de generación, con el 26,5% del total, seguida de la nuclear (21,6%) y la hidráulica (13,5%). El pasado año el carbón y el gas natural, que son las fuentes de producción más caras, tuvieron un mayor protagonismo que en este arranque de curso.
Ese abaratamiento del pool ha tenido su traslación al recibo de eléctrico. Así, l a factura media de un consumidor doméstico -un hogar con una potencia contratada de 4,4 kilovatios (Kw), y un consumo anual de 3.900 Kw a la hora- ascendió el pasado trimestre a 204 euros, frente a los casi 218 del mismo periodo de 2017. Es decir, un 6% menos. De esos 204 euros, 44 correspondieron al término fijo, que se paga en función de la potencia contratada, y donde se recogen buena parte de los peajes de acceso (transporte, distribución, incentivos a las renovables, amortización deuda eléctrica, etc..). La otra parte de este concepto viene incluida en el término de energía, por el que el usuario medio tuvo que abonar 114 euros. El resto correspondió al impuesto sobre la electricidad (8 euros), alquiler del contador (2,5 euros), y 36 en concepto de IVA).
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De esta bajada de precios se benefician los casi 11,5 millones de consumidores acogidos al PVPC, según los últimos datos registrados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). El resto de puntos de suministro para usuarios domésticos (casi 14,5 millones) tienen contratada su tarifa en el mercado libre. Es decir, que pagan el kilovatio consumido al mismo precio durante todo el periodo de vigencia del contrato, que suelen ser de un año. Cabe la posibilidad, en todo caso, que las comercializadoras decidan trasladar esa reducción a los nuevos contratos que se firmen en estas fechas, o a los que se renueven.
Las buenas noticias también se trasladan al gas natural. En concreto, a los 1,7 millones de usuarios de la Tarifa de Último Recurso (TUR), la análoga al PVPC eléctrico. Una tarifa que el ministerio de Energía revisa de manera trimestral, los días 1 de los meses de enero, abril, julio y octubre de cada año. Pero sólo en el caso de que el coste de la materia prima suba o baje más del 2%. Es lo que ha ocurrido en este comienzo de trimestre. Los mercados del gas natural han experimentado un descenso de precios, que están ligados a varios factores. Entre ellos, la oferta -en estos momentos hay mucha-, y el precio del petróleo, que suele servir como referencia.
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El caso es que el precio al que se paga el kilovatio/hora consumido (Kw/h), ha pasado de 0,05371476 euros a 0,05162097 euros (un -3,9%) para los usuarios de la TUR 1. Es decir, fundamentalmente para aquellos con un consumo anual que no supera los 5.000 Kw/h anuales. Este tipo de clientes -que utilizan el gas natural sobre todo para cocina y agua caliente sanitaria- pagan un término fijo de 4,28 euros al mes. Este concepto sirve para pagar los costes fijos del sistema gasista (transporte, distribución y almacenamiento, fundamentalmente), y el Gobierno tiene la facultad de elevarlos si cree que el sistema puede incurrir en déficits considerables. De momento, Energía ha optado por no tocar esta parte del recibo.
En cuanto a la TUR 2, está pensada para los usuarios domésticos que consuman entre esos 5.000 Kw/h anuales y un máximo de 50.000. Son aquellos que, además de para la cocina y el agua caliente sanitaria, utilicen el gas para calentar sus hogares. Para estos, el término fijo es el doble de caro: 8,44 euros al mes. Pero, a cambio, disfrutan de un precio por Kw/h consumido más barato. Este trimestre, además, ha bajado de 0,04684 euros a 0,04474, lo que supone una reducción del 4,5%. Una rebaja considerable, pero que de todas formas no sirve para compensar la mayor subida aplicada el pasado 1 de enero, que ascendió al 6,2%.
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La rebaja afecta, no obstante, a una minoría de los clientes de gas natural, puesto que de los 7,7 millones totales, 6 están en el mercado libre, por lo que seguirán pagando el precio pactado con su compañía comercializadora.
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