El seguimiento de la huelga convocada por el sindicato ELA en la factoría central de ITP Aero en Zamudio, en el que trabajan unas 1.200 personas, ha sido reducido, afectando fundamentalmente al taller, mientras que en oficinas apenas se ha percibido, ... ya que gran parte de los trabajadores operan mediante teletrabajo.
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La jornada de hoy ha sido la primera de los cuatro días de huelga convocados por esta central sindical -15, 17, 22 y 24 de septiembre- que además también hicieron el pasado sábado una manifestación por las calles de Bilbao, en esta ocasión con el respaldo y la presencia de UGT.
Como es habitual, las cifras de impacto del paro difieren sustancialmente entre la dirección de la compañía y los representantes sindicales. Mientras la empresa cuantifica menos de un 30% la incidencia en en el taller, sin que se haya llegado a paralizar la producción, desde el sindicato ELA elevan la misma hasta el 75% y remarcan que se ha tenido que parar la producción.
Mañana miércoles se reúne por primera vez la mesa de negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la filial ITP SAU, una de las principales del grupo, que integra las plantas de Zamudio (la mayor del grupo y donde está la sede social), más las factorías madrileñas de Alcobendas y Ajalvir. En base a la situación sanitaria por el Covid-19 las reuniones serán telemáticas, sin desplazamientos entre sedes.
Se espera que la compañía mañana aporte a la parte social más detalles sobre sus planes, después de que el pasado mes de julio anunciase «la necesidad de un ajuste de plantilla del orden del 15% de forma global», en el conjunto de los países en los que operan. Fuentes de la compañía insisten en que la situación que le ha llevado a tomar esta decisión «no es una crisis coyuntural, la recuperación va ser a muy largo plazo, mucho más allá de cuando finalice la pandemia, estimándose 4/5 años para llegar a los niveles del 2019».
En esta cuestión difieren los sindicatos, en que ELA estima que se trata de una «crisis coyuntural» y que la empresa tiene fortaleza financiera para afrontar la misma sin despidos, tras haber logrado que entre 2026 y 2010 unos beneficios acumulados de 260 millones.
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Otro de los grandes motivos de fricción, es que el sindicato ELA reclama que la negociación del ERE se haga planta por planta, de la misma forma que se negocian los convenios colectivos y no en una única mesa para toda la filial ITP SAU. En la planta de Zamudio ELA es el sindicato mayoritario, mientras que en una mesa general su influencia en la negociación se diluye. ELA insiste en que «no aceptamos despidos» y tampoco que la negociación del ERE se desarrolle en una única mesa de negociación «que no nos representa».
Desde ITP Aero especifican que se constituye una sóla mesa de negociación porque «debido a la crisis, estas tres plantas de ITP S.A.U requieren ajustarse y acorde a los requerimientos legales esto debe hacerse a través de una única mesa de negociación donde estén representados los Comités de Empresa de Zamudio y Ajalvir así como los representantes de los trabajadores del centro de Alcobendas». Recalcan que «no es posible segregar la negociación por plantas, sin poner en riesgo la seguridad jurídica del proceso».
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