Orbea refuerza el papel de Estados Unidos en su nueva estructura

Las bicicletas no son solo para el verano. El tremendo boom que está afectando a a este sector sigue siendo una oportunidad para sus fabricantes. Una de las marcas históricas de Euskadi, Orbea, viene pedaleando con viento a favor en los últimos años y tras subidas reiteradas en la facturación las previsiones del fabricante de Mallabia (Bizkaia) son aumentar sus ventas ese 2022 un 24%, hasta los 350 millones de euros.

La compañía vende en España solamente el 20% de su fabricación que centraliza en sus instalaciones de Euskadi y Portugal, mientras que el 80% restante se exporta a Europa y Estados Unidos. El país norteamericano es uno de los que más crecimiento está registrando y una de las apuestas fuertes de la compañía vasca. Así, es el que hasta ahora era el responsable de Orbea en Estados Unidos, Nick Howe, el que asumirá un papel clave en la nueva estructura que la empresa acaba de hacer pública. Howe, asumirá la dirección general de las ventas -Global Sales Director-. Puesto que desempeñaba hasta ahora Gonzalo García de Salazar y que será el responsable de un nuevo puesto, director estratégico de ventas -Sales Strategy Director-. García de Salazar ha destacado que «iniciamos una etapa muy ilusionante: además de seguir avanzando en nuestras posiciones en los diferentes mercados, vamos a enriquecer todavía más nuestra propuesta de valor tanto para la comunidad ciclista como para la distribución y, de este modo, continuar siendo una referencia para la sociedad».

Al equipo se incorpora un nuevo responsable del mercado norteamericano, Cary Tatro, que sustituye a Nick Howe. Para el director general de Orbea, Jon Fernández, «entramos ahora en una nueva etapa en la que seguiremos pedaleando fuerte para alcanzar los ilusionantes retos que riders y clientes nos proponen día a día».

El movimiento evidencia el peso de Estados Unidos, un mercado líder en el mundo de la bicicleta donde se espera un aumento de las ventas de un 5,5% hasta 2025 sobre un volumen total de entre 15 y 20 millones de unidades. Además, es uno de los polos de innovación en el diseño y aplicación de avances. No es casualidad que el fenómeno 'gravel' -adaptación de una bicicleta con cuadro de carretera para caminos- haya nacido allí.

De hecho, Orbea, con presencia en Estados Unidos desde hace más de 15 años, trasladó su sede a Boulder (Colorado), uno de las 'mecas' del ciclismo que ha alumbrado los más importantes desarrollos tecnológicos como los sistemas de suspensión o frenos de disco.

Normalizada la recepción de suministros

En 2021, las ventas de Orbea superaron los 282 millones de euros, lo que supuso un 41% más que en 2020. Y es que tras la pandemia, el 'boom' ciclista se hizo notar en la demanda. Un crecimiento, en cambio, que unido a los problemas de transporte internacional produjeron importantes atascos en la producción por falta de componentes críticos. Sin embargo, tal y como confirman fuentes de Orbea, actualmente «ya se ha normalizado la entrega de suministros». El caso es que se confirman las previsiones de cerrar este año un nuevo récord de ventas con 350 millones de euros. El número de empleados alcanza las 1.000 personas y solamente el año pasado la plantilla creció en 170 empleos.

Oquo, ruedas 'made in Orbea'

La semana pasada, la marca ubicada en Mallabia, presentó además una nueva línea de negocio con el lanzamiento de una marca propia de ruedas, Oquo. Se trata de un producto de alta gama diseñado y testado en las instalaciones de Bizkaia y que permitirá a los usuarios interactuar en el proceso configuración y personalización de las ruedas.

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