Moñux se despide con aviso a los sindicatos huelguistas: «En Michelin no se entiende la confrontación»

El directivo de la multinacional francesa, recientemente elegido por el grupo francés para capitanear los Productos de Especialidades para toda Europa, denuncia «escenas de coacciones, intimidación y miedo en el interior de la fábrica» durante estas últimas jornadas; marcadas por cuatro convocatorias de huelga en ocho días que no han hecho más que empezar: mañana será el segundo paro en la factoría.

A ojos de Moñux, las movilizaciones «están dañando lo más importante para nuestro futuro, que es nuestra credibilidad». El responsable de Michelin Vitoria habla en esa carta de un regreso a tiempos del «siglo pasado» a raíz de estos conflictos. «Estoy muy triste, fundamentalmente por las personas de esta fábrica que tienen miedo y están sufriendo», lamenta.

«Y lo más duro es que haya personas hoy en día, que comentan que se sienten satisfechas de que hayan vuelto esos tiempos de las coacciones, la intimidación y el miedo, por encima del respeto y el diálogo», apostilla en referencia clara a los sindicatos huelguistas, a los que deja referencias veladas pero no menciona a lo largo de los diez párrafos de despedida que ha dejado a sus empleados de confianza.

El directxivo referencia del fabricante francés en Vitoria insiste en ese texto en una de las ideas clave de su mandato al frente de la factoría: «Estamos en un momento clave para las fábricas de Michelin en Europa». En ese momento clave, las huelgas -tildadas de «días negros»- perjudican a Vitoria, opina Moñux, que lanza una dura advertencia: «Hoy en día, por la manera que Michelin tiene de tratar a las personas, pensamos que nunca va a pasar nada en esta fábrica».

La carta de Moñux hace hincapié en el papel de los trabajadores para el futuro de la fábrica y les pide «responsabilidad». «Desde mi nuevo puesto desearía poder seguir soñando con vosotros con una gran fábrica de futuro», señala para cerrar un texto en el que el director de Michelin Vitoria también presume de la atracción de nuevas inversiones «para producir los neumáticos del futuro» o la defensa de proyectos para modernizar la fábrica, que precisamente ha sellado su ampliación durante su etapa al frente de la planta.

La misiva de Moñux ha trascendido menos de 24 horas después de que un millar de trabajadores recorriesen este lunes las calles de Vitoria para respaldar las huelgas en Michelin. El texto, de hecho, se conoce antes de la segunda jornada de paros en la fábrica, que será mañana. Este miércoles también se espera que trascienda la postura de Comisiones Obreras (CC OO), central mayoritaria entre los sindicatos y con la llave para sacar adelante el convenio o reforzar las huelgas, convocadas hasta ahora por CGT, ELA, ESK y LAB.

Moñux, de hecho, afronta sus últimos días. El 1 de julio partirá hacia Clermont-Ferrand para ocupar su puesto en la cúpula de Michelin. El nuevo director de la planta de Vitoria será David Udakiola, hasta ahora al frente de la instalación que el grupo tiene en Lasarte.